Cuando era pequeño había querido ser un alfa imponente, cuando creció un poco más quiso ser un beta y ser invisible, pero justo ahora maldecia a la naturaleza por hacerlo un omega, casi nadie en la orden dorada lo tomaba enserio al ser uno de los pocos omegas de esta y la mayoría de sus compañeros alfas se burlaban de él porque además de ser un omega tenía los rasgos de una mujer
A sus 15 años de edad y sufriendo su segundo celo del año maldecia a la naturaleza más que nunca, su cosmo había disminuido increíblemente, tenía fiebre y el dolor en su estómago lo estaba sacando de quicio. Por un momento pensó si al tener un alfa sus celos serían diferentes pero sus pensamientos se disiparon rápidamente al oir personas entrando en el templo
La mayoría de los caballeros dorados estaban entrenando así que no sería muy útil pedir ayuda por cosmos además de que al haberse reducido su cosmo no podía hacer eso ni atacar a quien sea que estuviera acercándose a su habitación
Varios guardias entraron a la habitación del Piscis, lo encontraron en su cama sudando y abrazando sus piernas mientras estaba hecho bolita, lo miraron con una sonrisa en sus rostros y Afrodita se dio cuenta de que aquellos guardias eran alfas, su olor los delataba
Tenía miedo, se abrazo aún más a sí mismo mientras temblaba esperando que ni se les ocurriera utilizar su voz de alfas, esa voz era conocida por hacer que cualquier omega cumpliera las órdenes del alfa y Afrodita no estaba interesado en averiguar si era o no verdad
Antes de que alguno de los cuatro guardias dijeran alguna palabra, algo golpeó a uno de ellos por detrás justo en la cabeza, los cuatro voltearon y se encontraron frente a frente con quien había golpeado al guardia y sin dudarlo ni un momento, atacó a los otros tres que sólo tomaron a su compañero y salieron corriendo del templo
Afrodita ni siquiera miraba que era lo que pasaba, tenía los ojos cerrados fuertemente y sólo escuchó como alguien se iba, no abrió los ojos porque aún tenía miedo Pero al sentir una caricia en su cabeza y una voz hablandole se sorprendió
-Eh tranquilo... Ya se fueron, todo está bien ¿tú estas bien?
Afrodita abrió poco a poco los ojos y vio a quien le acariciaba la cabeza, Deathmask
-Estoy bien- dijo a penas
Le sorprendía que Deathmask siendo uno de los más desconsiderados de los caballeros dorados, se preocupara y por él
El canceriano sólo miraba con ternura al peli celeste, cuando el piscis no había ido a entrenar, se había preocupado y había salido corriendo directo al templo de aquel, al ver que cuatro guardias estaban en la habitación del doceavo caballero y al notar el dulce olor a Zarzamora recorriendo el templo, se enfureció de inmediato y golpeó a uno, luego atacó a los otros tres y estos salieron corriendo
Cuando esos cuatro guardias se fueron, miro al chico que estaba hecho bolita en su cama y se acercó lentamente para empezar a acariciar sus cabellos
-Gracias- escuchó decir al Piscis
- No hay problema, no iba a dejar que te hicieran algo
Deathmask se acostó junto a Afrodita y lo abrazó, el peli celeste se acurruco en el pecho del contrario y luego de oler el aroma que desprendía Deathmask pareció tranquilizarse
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Otro Capítulo!!!! Hace unos días que no publicaba pero aún así me encanto el resultado
Me puse a investigar del omegaverse para este cap y me pareció muy interesante todo lo que uno se encuentra616 palabras
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Rosas mortales
FanfictionCompilación de mini historias de la pareja Deathmask x Afrodita