capítulo 7

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Narra Phillip
Era el día perfecto para grabar un vídeo, nadie me podría distraer y tendría todo el tiempo del mundo. Me senté en mi escritorio y prendí la cámara, se supone que jugaría Fortnite pero tenía mucha hambre y no podía empezar con el estómago vacío, salí del estudio hasta la cocina para buscar algo de comer y de repente alguien tocó la puerta. Abrí para ver quién era

-buenas tardes señor Felipe-dijo el policía Miguel

-señor Miguel ¿Qué lo trae por aquí?- le pregunté haciendo que pasara a la sala

-queria hablar con el señor Misael respecto al tema de su expareja, ¿Está él en casa?- pregunto

-si, le diré que lo nesecita- dije para irme a buscar a Missa a la habitación

Abrí la puerta y el estaba acostado en la cama con su portátil

-cariño- dije

-si dime- respondio

-el señor Miguel está aquí y te nesecita- le informe

-¿Qué quiere ahora?- dijo Missa levantándose de la cama

Salí de la habitación junto a él y deje que ellos dos hablarán mientras que yo me dedicaba a seguir con el vídeo, pero teníamos otra sorpresa. Tocaron la puerta y Missa se paro del sillón para abrir, era Marcos.

-no quería interrumpir lo que sea que están haciendo- se disculpó Marcos

-no está interrumpiendo nada señor Marcos- le dijo Miguel

Vi como Marcos miraba a Missa y este le hizo mala cara como siempre. Después de que Marcos saludara al señor Miguel se acercó a mí

-¿Cómo va todo?- saludo

-bastante bien- le contesté cortante

Un silencio incómodo nos inundó, yo quería entrar al estudio pero no quería dejar a Marcos hablando solo

-y ¿cuando es la boda?- preguntó

(¿Qué?)
-¿Que?- le pregunté de vuelta

-solo estoy jugando, pero para ser sincero me sorprende que aún no se hayan casado- dijo con una pequeña sonrisa

A mi también me sorprende un poco, pero lo que nadie sabe es que le voy a proponer matrimonio cuando este problema acabé

-dime algo Felipe, acaso tú...¿darías la vida por él?- pregunto refiriéndose a Missa

-si lo haría, estoy dispuesto a entregarme a Mafer solo para que él esté feliz- respondí

-oh si claro, de seguro se pondrá muy feliz saber que te entregaste y que probablemente ella te asesine cuando te tenga en sus manos- dijo con sarcasmo

Tiene un punto

-escucha Marcos, todo esto es culpa mía jamás debí haber venido a México en primer lugar- dije mientras entraba al estudio

-esto no es tu culpa y lo sabés, es culpa de esa perra- dijo también entrando al estudio conmigo

-¿ahora nos defiendes?- pregunté sin mirarlo

-queria pedirte perdón por esa bienvenida del otro dia- dijo

No respondí nada, seguía mirando la pantalla del computador

-debí haber escuchado la historia antes de juzgarlos, aunque siga sin estar de acuerdo del todo- siguió hablando

-¿Por qué no estás de acuerdo?- pregunté

Marcos no respondió mi pregunta

-¿Por qué no estas de acuerdo?- pregunté nuevamente

-solo no lo estoy...-respondió

Sin Importar QueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora