UNA LUZ EN LA OSCURIDAD

Capitulo 47

La consternación de las primeras hora paso, dejando en su lugar a la tranquilidad, Rey sale de darse un baño, mientras Kylo espera paciente en la estancia, atento a un programa ridículo, sin fijar atención en el contenido "vamos Ben, todo esta listo" ella sonríe con una paz que logra transmitir alegría, sin más los dos toman asiento y él sirve los platos " espero que te guste, no es tan especial pero es muy rico"

"en verdad te gusta cocinar" ella se lleva un bocado y él la observa imitando su movimiento

"cuando pasas mucho tiempo con hambre, cocinar me hace agradecer lo afortunada que soy de contar con alimentos... Ben ¿desde cuando te pasa? lo de hace unas horas"

"Comenzó poco después de la muerte de mi maestro... Rey no vuelvas a repetir eso, no lo controlo y no quiero dañarte, no quiero ser como mi abuelo"

"¿Que es lo que pasa cuando estas así? parecía que no escuchabas... estabas como ausente"

"escucho voces, es como si algo controlara mi cuerpo y mi mente... no escuche a nadie, solo recuerdo sentir tu luz y tu voz llamándome" él saborea cada bocado "esto en verdad te quedo muy rico, tienes talento para la cocina"

"cuando estaba en Jakku y recibía mis raciones, hacia el intento de cocinar lo poco que tenia para variarlo, por eso ahora lo disfruto, puedo hacerlo con ingredientes reales"

Los dos terminan y deciden regresar al ridículo programa que estaba viendo antes de su comida, ella cambia a uno de sus programas preferidos, sus cursis novelas rosa, mientras Kylo protesta "nooo Rey"

"siguen gustándome, mis habitaciones mis reglas Ben" recarga su cabeza sobre el pecho de él, sin prestar atención a sus protestas, a lo cual solo responde con una mueca de desagrado 

"es mi nave"

"oh si... también es mía" sabe que perdió y decide no protestar más, pasan un par de horas viendo los intrincados dramas en la pantalla, es una tragicomedia, él piensa ahora que no están tan alejados de la realidad, sin embargo todo tiene un tono tan cursi que llega a ser hostigoso; termina su programa y él decide que es suficiente, debe distraer a Rey de la idea de otro programa igual.

"gracias Rey por la comida y lo del hangar... creo que debo irme ya" ella se levanta para sentarse sobre sus rodillas al lado de él.

"quédate conmigo Ben... no te vayas, solo por hoy" sin temor se sienta en las piernas de él y rodea su cuello con sus brazos y comienza a besar su cuello con suavidad, con la idea de convencerlo "quédate Ben" no hace falta que lo siga intentando, esta convencido

"¿recuerdas que paso en este sofá?" ella sin pensarlo más se sienta frente a él, recibiéndolo entre sus piernas, sin despegar sus labios de su cuello, las manos de él recorren sus curvas con dedicación, buscando el ziper de su vestido, que se resiste a caer de sus hombros, ella le sube sobre la cabeza la camiseta, mientras lo besa con fuerte convicción, juega con su melena oscura y él logra deslizar el vestido bajo sus hombros y dejándolo caer al piso, sus manos recorren cada centímetro de su suave piel, de sus leves senos, su boca reconoce su cuerpo como suyo, y ella se deja poseer por él una vez mas, la reclama otra vez como suya y se reencuentran de nuevo en ese sofá, testigo de su unión una vez más, palabras que se quedaron en la pasividad del tiempo se vuelven a pronunciar, reafirmando su voluntad de reencontrarse por segunda vez "te amo Rey" se escucha como una confesión, mientras los dos alcanzan juntos la conclusión máxima de su deseo y pertenencia, el sudor y la humedad quedan como la evidencia de sus profundos deseos consumados, reposan los dos después del intenso momento, ella queda sobre él, sintiendo su piel pegajosa y desnuda sobre su pecho, acaricia su largo cabello y reparte besos inocentes por su rostro "esta vez no tuve que embriagarte... aquella vez estabas muy nerviosa" sus voces son suaves y en complicidad.

"duerme conmigo Ben... no te vayas"

"estoy contigo cariño... Rey ¿quieres ser otra vez mi esposa?"

"siempre Ben... no me importa si es en un palacio, en esta nave o en una choza, siempre estaré contigo"

"ya no podemos realizar una boda, pero alguna vez podremos celebrarlo como se debe" ella mira a la nada solo disfrutando de su cercanía

"regresa aquí conmigo"

"por ahora no es posible... hasta que pueda controlar la oscuridad que me llama... Rey no quiero lastimarte... nunca me lo perdonaría, pero quiero que volvamos a compartir nuestro tiempo, cuando este libre de esos lapsos"

"no me gusta eso Ben... yo te ayudare"

"no cariño, hasta que este bajo control, solo sera temporal"

"supongo que no ayuda que insista" ella besa con mimos su pecho desnudo cada cicatriz es un suave beso de Rey, aun falta tiempo para el inicio de una nueva jornada, Kylo la toma entre sus brazos para llevarla a la cama, donde una vez más reviven sus deseos, sin dormir pero vale la pena cada minuto sin sueño, para hacerla suya una y otra vez, como un ejercicio para recuperar los encuentros pendientes, la anterior vez, en el salón del gran ventanal, se quedaron con todo por decir y hacer y esta vez, nada se queda pendiente, siente su cálida piel de sus piernas, y lo tenso que sus senos responden a sus manos, la humedad de su entrepierna lo reclama una vez más, para recibirlo sin reparos, y de nuevo esas palabras que son mas que una confesión se escuchan en la alcoba "te amo Ben"; agotados por todas las rondas que dieron en aquella cama se rinden al sueño, de nuevo sin insomnio, sin pesadillas, sin desesperación, la única compañía que deseaban la tiene al lado, entre sus brazos todo parece no importar.

El sueño fue placentero y duró más de la hora común para iniciar una nueva jornada; Kylo despierta antes y disfruta de verla dormir, no se cansa de esa afición, es embriagante para él, solo observar su tranquilo sueño, nunca fue capaz de dejar de amarla a pesar de todo, y seguirá haciéndolo hasta el final, se jura a si mismo, Rey de a poco comienza a despertar para encontrar sus ojos en su color natural.

"¿ aun quieres que vayamos a la nebulosa?" es lo primero en decir ella solo confirma con un movimiento de su cabeza y vuelve a acurrucarse a su lado, la tibia cama la retiene un poco mas, sus sabanas de nuevo adquieren su aroma, ese que estaba perdido y que solo su cama sabe cuanto extrañó.

En el camino al hangar, la carnicería del día anterior paso al olvido, se ve a la pareja imperial caminar por los corredores, juntos del brazo, esta vez no es un acto publico ni oficial, es un gesto personal, la sonrisa de Rey delata su felicidad que vive en ese instante, de él bajo la mascara también lo hace. Al llegar a la nebulosa, esa de colores azules y rosados, se permiten callar un momento para admirarla, hasta que ella rompe el silencio.

"siempre quise volver" están en cada asiento asignado al piloto y copiloto, se toman de la mano, y él desliza su pulgar sobre su pequeña mano de Rey.

"yo lo hice muchas veces"

"¿De verdad? ella se sorprende

"si... me recordaba a ti... cuando te extrañaba venia a este lugar, para recordarte... Rey te extrañe mucho... más de lo que puedes imaginar"

" yo también te extrañaba Ben, en mi vida, en mi mente, en mi cama, en todos lugares"

" quise venir aquí contigo otra vez, para volver a renovar mis promesas Rey, nunca cambiaron"

"las mías si cambiaron Ben... yo prometo que estaré siempre contigo, no importa lo que hagas, a pesar de cualquier circunstancia, te amare a pesar de todo, mi lealtad y fidelidad estarán contigo hasta él ultimo día de mi vida" y tal como aquella vez, ella desliza su liviano vestido por su cuerpo para descubrir su piel, con la firme intención de sellar estas nuevas promesas, ahora esta segura de quien es y de lo que quiere, y lo quiere a él, a Kylo  o Ben, para ella es el mismo, conoce a los dos, y los ama igual, el tiempo vuelve a detenerse en aquel asiento, en aquella nave, en aquella nebulosa de colores azules y rosados.