HE'S MY TYPE

CAPÍTULO II: QUIERO CONOCERTE.

Entre ensayos de su club de especialización en música y seguir acosando con insistencia al chico llamado Beomgyu, fue que su semana pasó, más rápido de lo que él hubiese querido. Ahora sabía un poco más sobre el chico que lo tenía completamente idiotizado, ya que acompañaba a Soobin al club de música todos los días y podía ver su rostro con más frecuencia. Incluso llegó a creer que tal vez Soobin era su novio, o algo por el estilo, pues siempre que lo escuchaba cantar, Beomgyu sonreía abiertamente.

Cosa #1 que Taehyun sabía sobre Beomgyu: le gustaba oír cantar a Soobin. Con nadie más sonreía.

Y como Taehyun era un desvergonzado de primera, simplemente dejó saber a Soobin lo que su mente albergaba.

-Soobin hyung, ¿Beomgyu es tu novio? – directo y sincero, ese era el estilo de Taehyun. Bien sabía que, si Beomgyu no estaba libre, entonces debía calmar a sus sentimientos antes de que salieran lastimados.

Pero Soobin comenzó a reírse mucho e incluso lo abrazó pasando un brazo sobre su hombro, para después agitarle el cabello.

-Beomgyumie es mi mejor amigo, Taehyun. Nada de novios.

Cosa #2 que Taehyun sabía sobre Beomgyu: no estaba en una relación con Soobin. Gracias a los dioses.

Incluso se propuso dejar su timidez de lado y entablar una conversación con Beomgyu, pero simplemente no sabía cómo iniciar una. Su mente tenía mil y un temas que quería expresar, pero ninguno era lo suficientemente bueno, todos eran tan raros o simplemente tan... Taehyun.

Pero él sabía que debía ser  sí mismo, siempre. Así que se preparó en la casa de Yeonjun con lo mejor que sabía hacer...

-No, no y no, imbécil, nada de trucos de magia – le dijo Yeonjun, mientras lo observaba con su ya tan viejo mazo de cartas.

-Me va a amar, yo lo sé.

-Vas a darle tanta pena ajena, que será el momento más incómodo de tu vida.

-Para momentos incómodos, los que tu protagonizas cuando Soobin te sonríe por los pasillos.

Yeonjun le tapó la boca, ya que Kai estaba en la cocina preparando unas palomitas, mientras ellos se encontraban en la sala.

-No digas eso aquí.

-Es la jodida verdad, ya haz algo con esos sentimientos que te cargas por él.

-No.

-Entonces déjame seguir mis instintos, no vine por tu opinión, estoy aquí porque estoy tan jodidamente idiotizado por Beomgyu que no sé qué hacer para que me note.

Yeonjun soltó una risa tierna, y le sonrió a su amigo mientras apretaba sus mejillas.

-Eres tan tierno, pero lo vas a espantar con tus trucos y es la verdad.

-Me importa poco, quiero que me conozca, incluso si soy solo el chico raro de las cartas para él.

Yeonjun asintió con pesar, sabiendo que tal vez no era la mejor idea, pero esperaba que funcionara.

Así fue como el viernes de una nueva semana Taehyun terminó con un mazo de cartas en sus manos y un nudo en su estómago terrible mientras se acercaba al espacio donde Beomgyu siempre se sentaba. El club había terminado sus actividades y todos estaban regresando a casa entre charlas, risas y discusiones de las canciones que debían presentar.

-Hola, Beomgyu hyung, ¿cierto? – le preguntó con una sonrisa y ganas de querer matarse ahí mismo, tenía su mazo de cartas preparado para mostrarle algo interesante a la persona que captaba su atención, rezando internamente por no avergonzarse mucho a sí mismo.