Naruto: Reaccionando a nuestro futuro [Cancelada]

>>La tierra de las olas<<

Muchos pensaban en las oportunidades que tenía en equipo de kakashi de salir con vida e ilesos de esa misión. Y siendo honestos los resultados no eran positivos.

–Apuesto a que uno de los chiquillos morirá– apostó Hidan mirando al equipo que se tenso de inmediato.

–Yo también le entro– Hablo Deidara –Veinte a que esa rosada se muere–.

–Nah, 23 a que el rubio idiota morirá primero– hablo el jashinista mirando a Kakuzu –¿No vas a intentarlo, Kakuzu?–.

–No me interesa, sería una pérdida de mi dinero– se recargo en su asiento restándole importancia al juego.

–Ahh, vamos ¿Eres gallina?– aleteo y cacareo como una.

–Grr bien veintidós a que el hermano de Itachi muere– gruñó aceptando de mala gana.

–¿Ja, oíste eso Itachi? Apostaron a que tú hermanito morirá– hablo Kisame con una sonrisa escuchando la apuesta.

–Hm– cerró los ojos sin interés pero por dentro estaba enojado por tal apuesta –(Sasuke no morirá)– se autoconvenció.

El equipo siete se encontraba en un barco navegando en aguas tranquilas a través de la neblina.

–(Está niebla tan espesa, no se puede ver nada)– pensó la kunoichi.

–El puente no está lejos– avisó el dueño del bote –estaremos en la tierra de las olas pronto– dijo para después mostrarse un gran puente a medio terminar.

–¡Wow! Es inmenso– grito.

–Si, definitivamente yo ganaré esto– sonrió arrogante hidan mientras veía una muerte muy bella en el futuro de ese niño gritón.

Deidara junto con Kakuzu bufaron por la respuesta del religioso, pero tenía razón ese chiquillo se estaba haciendo matar.

–No debes gritar de esa manera en la misiones Naruto– le regañó nervioso el Hokage, había escuchado la apuesta y esperaban que se equivocaran.

–Ash– se cruzó de brazos en un puchero, sin embargo no objetó nada.

–Cállate niño, ya se los dije no hagan ningún ruido porque creen que estamos viajando así ¿Eh?– Miró enojado al rubio – Con el motor apagado, moviéndonos en la neblina para que no puedan vernos– le calló el señor.

–Ugh que sujeto tan pesado, le hace falta relajarse– hablo Genma recargado en su silla.

–Pero tiene razón si hacen ruido el enemigo los localizara de inmediato lo que causaría que los mataran– dijo Asuma sacando disimuladamente un cigarrillo.

–Tazuna-san– le llamó kakashi –Antes de llegar al muelle quiero pedirle una cosa con respeto a los que lo perseguían necesito saber por qué. Si usted no nos lo dice me temo que tenemos que ponerle fin a la misión cuando toquemos tierra– le dijo serio kakashi mirando de solsayo a sus alumnos.

Ante esto Tazuna y sus compañeros se tensaron y compartieron miradas nerviosas.

Sabían que el riesgo era mucho y no solo estaban a arriesgando la vida vida de ellos si no también la de esos niños. Pero para todo hay una razón y la de ella era una muy buena.

–No tengo más opción que contarle, no quiero que conozcas la verdad, como tú dijiste. El hombre que me persigue es un hombre muy pequeño pero con una sombra mortal– explicó Tazuna.