Después de salir del centro comercial tome la ruta a casa de mi abuela – suena tan caperucita roja-. Al llegar camine derecho a saludarla y le mostre el pequeño papel.
- ¿Te ganaste un viaje a Italia? – ella me miro confundida y preocupada al mismo tiempo. - ¿Es de verdad?.
Asenti.
- La verdad es que aun no decido si ir pero…
- Te entiendo, viajar sola tan lejos, además… es Italia, lo peor que puede sucederte es que el corazón se lo quede un joven.
Le mire con suspicacia.
- Quizas… - rode los ojos. – pero, es que, es cierto me preocupa.
- Yo digo, que lo hagas, total pasar unas vacaciones más acá, ir a la playa lo que puedes hacer en cualquier momento. O ir a un centro comercial, ver películas… puedes hacer eso en cualquier momento mi niña… además… - habia nostalgia en su mirada. – ya quisiera poder volver… tienes una oportunidad maravillosa.
Le mire con algo de tristeza sin que se diera cuenta y tome el pasaje en las manos.
- Creo que si ire… - sonreí.
- ¡Que maravilla! Y con respecto a tu madre tranquila… yo me encargo de Josefina….
Ladee el rostro pensando en mi pobre madre.
- De acuerdo… - camine al comedor donde ya esperaban mi madre y mis hermanos, con los que habia quedado visitar a mi abuela hoy.
Mis hermanos son… hermanos al fin y al cabo, siempre diferentes entre si. Especialmente conmigo, aunque entre ellos tienen su parecido. La mejor forma de describirlos a todos:
Paola, veinte años, testaruda, sobre protectora y un poco floja de la boca, no le importa decir lo que piensa cuando quiere.
Pablo, diecinueve años, insolente, pero igual de sobre protector, divertido y a veces desinteresado de lo que pasa alrededor
Ana, diecinueve años, relajada, y le gustan las cosas a su manera, siempre.
Esmailing tímido, reservado y muy inteligente
Esther (la nena), catorce años, testaruda como Paola e insolente como Pablo.
Lisbeth (lali), doce años, hacendosa, servicial pero un poco aislada a veces.
Mientras yo, era la mayor de todos.
Durante la cena, solo estaban Ana, y Paola. Mis hermanas maternas. – lo demás no es su asunto.
Mientras mis hermanas parloteaban y discutían entre si de asuntos con mi mama, ella al verme distraída con el vaso de agua inmediatamente poso sus ojos de madre calculadora y preocupada en mi.
Mis hermanas se dieron cuenta y mi abuela terminaba de repartir utensilios.
- ¡Hey! – grito Paola. – tierra a Leyna ¿al fin perdiste la noción del tiempo? Dime que si, o es que tenemos que internarte…
- ¡Paola! – grito mi madre. – deja a Leyna.
- Solo quería ser graciosa… - se quejo. – de verdad. ¿Te paso algo hoy?
- Uhm… oi un rumor sobre que una representante casi las vuelve papillas a ti y a Frammy – solto Ana y le mire entornando los ojos. - ¡¿Qué?! – se defendió. - ¡los chismes corren rápido!... no es mi culpa, solo lo oi.
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Saga Delucios 2.1: El Sello del Inmortal (Completada)
Short Story..."El deseo es la iniciativa para hacer cosas que quizas nunca hariamos" O una simple excusa. Conocer a un chico de aspecto angelical y mirada tentadora. La combinación perfecta para no pensar claramente. Un inocente viaje de verano puede converti...