Femme Fatale (AyanoAishixMaleRivals)

thirteen.

— ¿De que estaban hablando tu y el maestro hace rato? — pregunto Amao compañandola en el pasillo.

— Cosas básicas. Mi edad y mi opinión respecto al clima en Japón. — respondió la pelinegra,dirigendose a la azotea.

Amao la siguió,y en el segundo piso,encontraron a Aso,Oko y Osano. Ninguno tenía cara de haber entablado uno conversación. Así que en cuanto los vieron se acercaron.

— ¿Que tal estuvo la primer clase con tu profesor nuevo Aishi? — pregunto Aso con una enorme sonrisa.

— Bien. — respondió de inmediato mirando a todos lados — ¿Que hacen aquí? ¿No deberían estar haciendo otras cosas? — pregunto poniendo ambas manos su cintura,mientras los miraba uno a uno.

Ninguno contesto,bajaron la mirada apenados. Incluso Amao lo hizo.

— Nosotros... Queremos comer contigo. — dijeron avergonzados,mientras sacaban sus bentos.

Ayano los siguió analizando en silencio, quizás tenían otras intenciones además de almorzar,pero,se dió cuenta de que eso era imposible. Los 4 eran débiles ante ella,así que si pasaba algo,en automático se defendería.

— No suelo comer a esta hora. — dijo Ayano — Es malo para mi figura y otros aspectos que derivan de eso,así que,solo los acompañó. —

Osano recordó la primera vez que la vio,con esas ropas iniciaron los rumores que la convertían en una cualquiera.. y ¿Cómo no? Si ella tenía un cuerpo envidiable,excesivamente fuerte,pero,sin perder su feminidad.

Ese pensamiento hizo que se sonrojara un poco,pero se esforzó en ignorarlo.

— B-bueno... — Oko interrumpió sus pensamientos — ¿Nos vamos? — pregunto,recibiendo una respuesta afirmativa por parte de todos. 

Todos subieron a la azotea,y se sentaron en las bancas detrás de las columnas. Sacaron sus bentos e iniciaron su merienda tranquilamente, mientras Ayano revisaba su celular.

— ¿Dónde queda Múnich Aishi? — pregunto Amao de repente,llamando la atención de todos. — Mido-sensei dijo que él venía de ahí.. —

— Múnich es la ciudad de Baviera,al suroeste de Alemania. — todos le pusieron atención de inmediato — Es conocida por su festival cervecero Oktoberfest. —

Todos se quedaron callados,mirándose entre sí con asombro.

— Yo.... Jamás e probado una cerveza. — dijo Oko,mientras bajaba la cabeza — No me llama la atención beber,siento que es un vicio innecesario. —explico con incómodad,al sentir todas las miradas sobre el.

— En Alemania hay muchos tipos de cervezas,no necesariamente todas contienen alcohol. Algunas son incluso accesibles a los menores de edad. — todos se sorprendieron al escuchar tales declaraciones — Como es de esperarse,estás bebidas tienen colorizantes y son más dulces,apropiadas para los niños — se sintieron un poco más tranquilos al escuchar el resto de la situación — La más famosa es la cerveza de mantequilla.. —

— ¿Que no es la que sale en Harry Potter? — pregunto de repente Kizano,asiendo acto de presencia,mientras se sentaba alado de Osano,colocando un bento sobre sus propias piernas.

Todos lo miraron paranoicos,incluso Ayano ¿Que le pasaba a este chico? ¿Estaba tan loco que ahora los comenzaba a seguir?

— Continúa... Por favor. — suplico Kizano alentando a la chica con una sonrisa,ya no tan arrogante. — ¿Oh es que quieres pasar tiempo con Mido Rana? — cuestionó mientras abría su bento,para alimentarse.

Ayano alzó una ceja,mientras ponía ambas manos en sus caderas ¿Ahora de que hablaba este tipo?

De repente,el celular de todos los chicos comenzó a sonar,al mismo tiempo lo revisaron y se encontraron con algo desagradable se veía en sus caras.

— Si,a eso me refería. — dijo Kizano pasando un bocado,después de ver cómo los chicos ponían un gesto paranoico — Así que,por eso estoy aquí. En pocas palabras,me ofrecí como foco de distracción. —

Ayano seguía sin entender..
No es como si le importará o algo por el estilo,pero sabía que era algo que le involucraba,junto con el nuevo maestro.

Cuando notaron que Ayano estaba mirándolos espectante, todos guardaron su celular a mano torpe y sonrieron incómodos.

— Entonces... ¿Nos decías? — alentó Osano a qué continuará la historia.

Ayano soltó un chasquido de lengua rodó los ojos. No entendía las conductas adolescentes,a pesar de tener la misma edad.

— Como dijo el compañero,si,salió en las películas de Harry Potter — continuo luego de aclararse la garganta — Y deliciosa,cada familia en Alemania tiene su forma de prepararla,la receta pueden ir cambiando en generación en generación. Ahí es donde nace lo mágico. —

Todos asintieron con la cabeza,pero de inmediato supieron que debían cambiar de tema.

— Oh... Se nota que sabes mucho. — admiro Amao con una sonrisa dulce — ¿Creciste en Alemania toda tu vida? — pregunto con curiosidad,dándole una mirada al pastel con frutillas que estaba comiendo.

— Si, desde los tres años,fui criada por mi padre. — dijo alzando una ceja,mientras veía al piso,pensativa.

Algo en el ambiente cambio en ese instante,la pelinegra se veía ida,fuera de si. No dijo nada,o expreso palabra alguna después de decir eso,podían jurar que algo en ella estaba triste,pero no lo demostraba. Su rostro se veía igual que siempre, frío y con firmeza...

¿Acaso preguntaron algo malo? ¿Tocaron un tema sensible? No lo sabían,Ayano Aishi era todo un misterio,no importaba cuanto trataras de investigar sobre su vida privada. No encontrabas mucho,era como si no existiera.

— Eh... ¿Aishi? ¿Se encuentra bien? — pregunto Aso parándose frente a ella,mientras sacudía la mano.

En ese momento Ayano reaccionó de golpe,asustandolo.

— Si,estoy bien. — respondió tronandose los dedos — Me distraje pensando el algo,lo lamento. — se disculpó por su acto tan descortés.

El chico retrocedió un poco,pero asintio,luego de eso,sonó el timbre y todos tuvieron que ir a sus respectivas aulas en silencio,preocupados por haberla molestado.

Iban caminado en el pasillo,todos atrás de ella,cuando encontraron al profesor Mido coqueteando con una compañera del club de jardinería.

— ¡VAMOS POR OTRO PASILLO! — grito Amao asustado poniéndose frente a ella rápidamente — ¡Vamos por otro lado! Aún estando a tiempo! — sonrió con dulzura,trantdo de convencerla.

— Si... Vamos,sirve que mi salón queda cerca. — se le unió Oko Ruto,quien la empujó levemente hacia atrás.

De algún modo,la convencieron y decidieron ir por otro lado,mientras tanto,el profesor Mido los observaba con cierta gracia. No le costó trabajo adivinar que esos chicos tenían cierto interés en la joven,pero,sea lo que sea,no le importaba. Ayano Aishi iba a caer rendida a sus pies.