"¿Me das un besito?" ❁•[NyuKyu]

Outro: Muchos besitos.

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"Chanie~" canturrió el rubio, apoyado en la espalda del pelinegro, quien estaba concentrado tratando de cocinar.

Changmin hizo pucheros, porque él tenía que estar siempre pegado a su novio, y no podía en esa extraña posición.

Escuchó a Chanhee bufar, antes de que lo encarara.

"Min, ¿puedes dejar un momento de hacer berrinche y sentarte por ahí? si sigues pegado a mí, nunca terminaré esto." Le dice al rubio, con sus cejas fruncidas, tratando de parecer molesto.

No era que le molestaba tener a su novio junto a él, pero en ese momento tenía hambre y Changmin solo quería tenerlo abrazado como koala, impidiéndole moverse mucho, y, por ende; duraría más en terminar la cena.

Rodó sus ojos divertido cuando vio al rubio pucherear como niño.

"Está bien." Dice Changmin derrotado. "Pero me debes compensar con muchos besos."

"Ajá-"

"La lengua hasta la garganta." Dice divertido, riendo cuando provoca que su novio se coloree como tomate.

"¡Changmin, no seas inmoral!" Grita avergonzado, sacándolo a empujones de la cocina.

Ugh, Changmin se había vuelto más descarado, está seguro de que eso lo escuchó de sus amigos.

Tendrían serios problemas esos.

"Changmin, ya déjame." Se quejó el pelinegro al tener al rubio sujetado a su torso, con la nariz hundida en su cuello, restregando su nariz contra la suave y blanquecina piel, provocándole escalofríos.

Una vez logró terminar la cena, marcadas las 23:00 en el reloj, se ducharon y decidieron que era hora dormir, pero parecía que el rubio no estaba de acuerdo en eso.

"Déjame." Gruñe, abrazando mucho más a su novio, apegándose más a su espalda si es que era posible. "Solo marco mi territorio." Dice, escuchando al contrario reír.

"Tú deberías de leer menos esas historias de omegas y no sé que cosas." Le dice encarándolo, hasta poderlo abrazar con mayor facilidad, entrelazando sus piernas bajo la sábana.

Changmin solo niega, tomando gustoso el abrazo que se le es dado, hundiendo su rostro en el pecho contrario, aspirando su rico aroma.

"Nop, es lindo." Dice, trazando figuras en la espalda del más pálido, mientras Chanhee reposaba su barbilla en la cabellera contraria.

"Puede que sí, de todas formas, tengo entendido que es el alfa quien marca su territorio." Susurra Chanhee, conectando su mirada con el otro cuando se separó de su pecho.

"Eso es exactamente lo que hacía." Responde incrédulo, acercándose otra vez al cuello contrario, hundiendo su rostro en este, mientras lamía la piel blanquecina, provocando que la piel del pelinegro se erizara.

"Mhg-" Se queja, mientras el rubio seguía repartiendo húmedos besos en su cuello. "Ya basta, Min."

Changmin pucherea mientras es apartado del cómodo lugar donde yacía.

"Déjame, quiero besitos." Dice ceñudo, colocándose encima del más pálido.

"Te doy todos los besitos que quieras, pero no más de eso."

Y Changmin no lo rechazaría, porque no había nada mejor que una buena sesión de besitos.

Muchos, muchos besitos.

Al final sí había valido la pena tanta espera e intentos fallidos.

Al final consiguió mucho más que besitos...

Y claro, reforzar la amistad fue todo un éxito.

¿Besitos para reforzar amistad? Totalmente efectivo.

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Gracias por leer, espero haya sido aunque sea un 1% de su agrado. <3

Espero leernos en otras obras, no soy la mejor escribiendo pero prometo que tampoco será lo peor que se encuentren. :D

Cuidense, y lávense las manitus, besos en las pompis.

Sean felices.♡