Hermana de Christian Grey. (Justin bieber y tu)

Capitulo 16

"Yo quiero estar con él. Y me da igual todo lo demás."

Había convencido a mi hermano para que me dejara quedarme a dormir a casa de Yaiza, y bueno el se pensaba que dormiría con ella... pero la verdad es que estaré completamente a solas con Justin ya que ella se ha ido con sus tios hasta mañana.

Aún así, ha puesto a dos guardaespaldas fuera de casa y mañana a primerísima hora ya tendría que estar en casa. Era un completo exagerado.

Será la primera vez que pase tanto tiempo con Justin a solas y creo que también será la primera vez que estoy con el sin que el me haya obligado o algo así.

Estaba feliz y nerviosa al mismo tiempo.

Feliz por que por fin podía estar con él sin nada raro de por medio, solo él y yo. Y eso me gustaba.

Y nerviosa por exactamente eso, por que me gustaba. Me había costado algo admitirlo o tal vez solo darme cuenta, pero Justin me gustaba... y eso me ponía nerviosa.

Habíamos cenado unas pizzas que yo misma había preparado, y después de limpiarlo todo nos fuimos al sofá.

Parecía algo tan normal...

Yo estaba entre sus piernas, frente a él.

Empecemos viendo la televisión.. pero Justin no dejaba sus manos quietas así que acabemos así.

Nos besábamos lentamente mientras el no para de acariciarme. Yo tenía mis manos en su cuello o pasándoselas por el cabello. Me dí cuenta que le gustaba que pasara mis manos por su pelo.

Me separé un momento de él para poder coger aire y lo vi mirándome sonriéndome. Parecía divertido, incluso sorprendido.

-¿Que pasa? -pregunté curiosa.

-Pasa que esto es mas raro que cagar de pie. En mi vida he estado así con una tía. -se pasó una mano por el pelo. -Lo mas cariñoso que le he echo a alguna ha sido limpiarle el semen que le dejado en la boca.

-¡JUSTIN POR DIOS! -me tape la cara con mis manos para que no me viera sonrojarme.- Eres un guarro.

Se empezó a reír hasta que me contagió la risa a mi.

-Voy a por una cerveza, ¿quieres algo? -me preguntó mientras se levantaba del sofá.

Negué con la cabeza y se agacho para darme un suave y rápido beso.

Me quedé sonriendo viendo como se dirigía a la cocina. Iba sin camiseta así que se le veía cada musculo de su cuerpo. Y eso me volvía loca.

No pude esperar a que volviese y fui corriendo a la cocina para estar con él.

Estaba rebuscando en la nevera y fui a abrazarle por detrás. Soltó una pequeña risa. Y empecé darle pequeños besos a su espalda desnuda.

-No has podido ni aguantar un solo minuto sin mi, eh. -dijo girándose. Tenía esa sonrisa picara típica suya. -Deberías probar a darme estos besos pero por cada parte de mi cuerpo.

Negué con la cabeza sonriendo y me lancé a sus labios.

Ya no me daba miedo, vergüenza o ese sentimiento de que estaba haciendo lo peor del mundo cada vez que lo besaba. Ya no.

Me pidió perdón por lo de la otra noche y yo le perdoné, eso ya estaba zanjado. Y bueno, no puedo negar que sea un poco violento y que tenga bastante mal humor..pero se lo acepto.

Yo quiero estar con él. Y me da igual todo lo demás.

-Ven. Vamos a la cama. -dijo subiéndome a sus brazos.