Narra Hanna
Me encontraba en mi casa, recibiendo mis clases de canto, si de canto, me gusta la música y aunque algunos meses atrás no estaba segura de dedicarme al mundo musical, hoy más que nunca se que debo perseguir mis sueños aún cuando todos los demás digan que es imposible, ¿Y sabes que? Nada es imposible o bueno si, lo imposible es lo que no se intenta y yo lo intentaría todo.
Por suerte tenía como profesora a una mujer maravillosa, Gabriela Sanz así se llamaba, ella me había motivado junto a otras personas a seguir mi sueño.
__ ¿Hanna en que piensas?—preguntó Gabriela
__ Nada profe pensaba en cómo sería mi futuro.—respondí
__ No me digas así, tú me puedes decir cómo quieras cariño,—dijo acariciando mi mejilla—y de seguro que será un futuro hermoso siempre y cuando me aprendas la vocalización correcta niña.
Odiaba tener que ver clases de vocalización, pero me gustaba pasar tiempo con mi profesora, y si se lo preguntan si, mi querida y hermosa profesora sentía una atracción por mi, no lo sabía disimular, aunque nunca se ha atrevido a decirme nada ¿sera porque ella es 4 años mayor que yo? ¡si señores! mi profesora tenía 22 años y quizás por eso ¿Lo veía mal? ¿O tenía miedo que no le correspondiera a sus sentimientos? No lo sabía pero aún así disfrutaba mucho su compañía.
__ Tienes que tenerme paciencia estoy empezando con esto.—dije con mi carita de gato con botas
__ Lo se preciosa, solo bromeaba, sé que todo lleva su tiempo y tú tienes talento pero hay que mejorar ciertas cosas.—dijo
__ Entonces ¿Qué esperamos? Vamos a darle con todo.—dije con entusiasmo
Quería mejorar, tenía tanto sueños, quería ayudar a muchas personas con situación de calle, quería crear orfanatos para niños huérfanos, pero sobre todo quería ponerle el mundo a los pies a mis padres, a las personas que me educaron con valores desde pequeña, y sobre todo quería asegurarme que mi Samantha tuviera un futuro maravilloso.
(2 horas después)
__ Terminamos por hoy.—dijo Gabriela__ ¡Por Fin!—dije sonriendo
__ Estoy por pensar que no te gusta pasar tiempo conmigo.—dijo
__ Claro que si me gusta, y para demostrartelo te invitó a almorzar ¿Qué dices?— dije
__ Me quedó pero si te ofreces como postre.—dijo sonriendo
Trague pesado y camine a la cocina.
__ ¿Qué te gustaría comer?—pregunte
__ Me encanta la sopa, ¿Sabes prepararla?—preguntó
__ Obvio que si, no creas que solo tengo una cara bonita también se cocinar.—dije
__ Ven yo te ayudo.—dijo
Comenzamos a cocinar y debo admitir que mi profesora se veía tan sexy se había quitado su chaqueta y tenía una polera que prácticamente le cubría sus pechos, ¿En qué estoy pensando? Ella es mi profesora.
__¿Dime algo que no te guste?—dijo
__ El aguacate.—dije
__ ¿¡Qué!?—dijo ¿Sorprendida?
__ Si así es.—dije
__ No puede ser, a mí me encanta el aguacate.—dijo
__ Bueno las personas tenemos gustos diferentes ¿No crees?—dije
__ Si lamentablemente es así.—dijo
Terminamos de cocinar y servimos la comida, en realidad tenía mucha hambre así que empecé a comer y mi profesora no se quedó muy atrás, también lo hizo. Ella y yo teníamos mucha confianza nos conocíamos desde hace 6 meses y desde aquel entonces se convirtió mas que en una profesora para mi, en ella podía confiar con los ojos cerrados y si para algunas personas 6 meses no son nada, pero digamos que me transmitió una confianza increíble desde el primer día.
A veces no importa el tiempo que tengas conociendo a esa persona, sino las cosas que te demuestra con sus actos tan dobles y sinceros.
_________________________________
Continuará...
ESTÁS LEYENDO
No Te Quiero Nada Ha-Ash [TERMINADA]
Aléatoire¿Por qué tantas mentiras? ¿Por qué tantos engaños? ¿Por qué no siempre recibimos lo que damos? Pero bueno... Casi nunca recibimos lo que damos, pero siempre damos lo que somos y eso es lo importante ¿No?