las verdades de la cuaima

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Era de día y el grupito apenas podía levantarse, se habían quedado hasta muy tarde echando cuentos y se les había olvidado que al día siguiente tenían liceo.


— Miren, párense vale — Jisung fue el primero en abrir los ojos, y tristemente tenía la frustrante tarea de despertar a los demás — Parense verga, que mi mami se va a arrechar si llegamos tarde


Jeno se removió incómodo ya que tenía el pie de Renjun en una costilla — Que ladilla, ¿quién coño inventó los liceos? — Tiró la pierna de Huang lejos para así poder levantarse, se estaba cayendo del sueño, pero tenía que estudiar ¿no?


— Miarma, ¿Ya es de día? — Chenle miró hacia la ventana, luego a sus amigos y posteriormente se acostó a dormir


— Mira coñoetumadre — Jisung pateó levemente el cuerpo del chino — Párate vale, ya Jeno se levantó


— ¿Y eso en qué afecta a mi sueño? — Preguntó Zhong abriendo solo un ojo — No molestes y déjame dormir — Dijo, y luego volvió a dormir


Park rodó los ojos, tenía pensado irse con Jeno y dejarlos — ¿Se paran o los paro? — Preguntó hacia los dos chicos que habían dormido junto a él esa noche como sardinas en lata


Jaemin se giró para darle a espalda a Jisung, mientras que Donghyuck se abrazó al cuerpo de Na, y ahí se quedaron durmiendo nuevamente


— Menos mal que Hyuck es pana mío porque esa vaina me arrecha — Comentó Jeno que había salido del baño — Coño párense vale, es enserio, tenemos que irnos


— ¿Pararse para qué? — Renjun semi abrió sus ojos, pero la luz le molestaba así que los volvió a cerrar — ¿No ven que estoy durmiendo y cargo un tremendo sueño encima?


— Hay liceo, pana, li-ce-o — Puso su pie encima de la barriga de Renjun, mirándolo — A que te aplasto la panza


— Si vas a soportar el vómito pues ta bien, aplasta — Huang volvió a cerrar los ojos, empezando a imitar unos ronquidos


— Jisung, vámonos — El nombrado se miró se pies a cabeza — Caraj plasta, despertando a todo el mundo y ni te has lavado el hueco er' culo


— Mala mía — Jisung se encogió de hombros mientras iba hacia su armario, sacando el uniforme planchaito para luego irse a bañar


— Jaemin — Jeno susurraba en el oído del chico, mientras lo movía de un lado a otro — Despierta vale


Donghyuck abrió los ojos levemente al sentir una tercera persona cerca de ellos, encontrándose con la escena de 'amor' de ambos — AAAAAAAAA — Donghyuck gritó mientras se sentaba, pateando el cuerpo de Jaemin que terminó cayendo encima del de Jeno


— ¿¡QUÉ VERGA ES!? — Na se levantó como alma que se lleva el diablo, respirando profundamente — BUENO, LEE JENO, ¿Y ENTONCES? ME VUELVES A DESPERTAR ASÍ Y TÚ Y YO TERMINAMOS, MARDITO.

MARDITO JOHNNY | NCTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora