Magisch | JiKook AU

↬32; Secreto

    Había estado esperando que llegará el fin de semana no por otra razón más que hablar con alguien que no fuese su hermana o su madre; con la última ni siquiera cruzaba más que simples monosílabos cuando la situación lo ameritaba.

    Y pese a que tenía a SeokJin a solo un muro de distancia, no deseaba visitarlo cuando empezó a sacar conclusiones erróneas respecto al reciente asunto de JiMin y él despertando en el mismo cuarto.
  
    Eso lo llevaba a su última opción viable. Desde el comienzo de sus vacaciones, era como una tradición que YoonGi se pasara por su casa cuando no estaba trabajando en la tienda de música y eso solo sucedía los fines de semana. Pasarían toda la tarde juntos, comerían deliciosa carne en el almuerzo y llegada la noche compartiría una deliciosa cena junto a su pequeña familia, luego YoonGi se iría y él volvería a sus videojuegos. Quizás si tenía suerte, Yugyeom dejaría de ignorar sus mensajes y entonces podrían jugar juntos.

     Sin embargo, todo dió un giro inesperado cuando recibió una invitación de JiMin para salir a comer por ahí y no es que se haya sentido entusiasta por responder con una afirmativa, pero al final sus dedos habían cobrado vida propia y había aceptado sin más.

     Arrastró a su Hyung con él y juntos fueron a almorzar con Park. Lo que al principio empezó como una conversación en la que incluyeron a YoonGi lo más que podían, acabó por ser algo entre JiMin y él hablando sin parar; riendo por tonterías y consumiendo comida chatarra, hasta que JeonGguk decidió parar de comer por el bien de conservar sus amados abdominales justo en su sitio.

     No iba a mentir, si no fuera porque revisó su celular un mísero instante mientras JiMin iba al baño, no se hubiese enterado nunca de que su otro Hyung se había ido con HoSeok en algún momento en que estaba demasiado distraído con JiMin para notarlo.

      Cuando JiMin regresó con él, le hizo saber con una sonrisa que ese solo era el comienzo de su día y no tenía intenciones de dejarlo ir hasta que hubiesen visitado el arcade en el centro comercial y alguna cafetería para una merienda. JeonGguk sospechaba que JiMin estaba haciendo todo eso para ausentarse de su casa, cuál fuera su razón para ello, él no iba a rechazar una oportunidad como esa para estar lejos de su propio aburrido hogar.

      Una cosa llevó a la otra y ambos acabaron cenando hamburguesas grasosas de algún puesto de comida barato. Posteriormente, regresaron caminando, porque JeonGguk insistió en que JiMin debía dejar de derrochar dinero a lo loco.

    No obstante, ni el dolor en la planta de sus pies detuvo a JiMin de tomarlo del brazo y adentrarnos a los dos en una casa aleatoria donde se daba una fiesta de quién-sabe-quién; siendo bastante raro que a esas horas la fiesta estuviera tan prendida cuando las cosas solo se ponían interesantes después de las doce.

—Solo quiero conseguir un trago gratis, luego te regresó a tu casa sano y salvo —fueron las palabras que musitó el mayor, tirando de sus manos entrelazadas para adentrarlos cada vez más en la aglomeración de personas que bailaba alguna canción que desconocía en un idioma tan lejano como lo es el español. JeonGguk se dejó hacer con una sonrisa plasmada en su rostro, no es como si nunca hubiese estado en una fiesta antes, pero las cosas con JiMin eran más divertidas que de costumbre.

     Llegaron a la cocina del lugar donde estaba todo el montón de bebidas alcohólicas y se quedaron ahí. El mayor soltó su mano y consiguió hacerse con una lata de cerveza que JeonGguk lo observó acabar en un tiempo récord, asombrado por su habilidad.

—¿Quieres una? —el ofrecimiento lo tomó desprevenido, pero no le negó una cerveza. Después de todo, solo era una, no iba a emborracharse solo por eso.

     Al final, no fue solo una, sino dos paquetes de seis que acabaron entre los dos para después meterse entre los desconocidos, bailar y seguir bebiendo lo que se le cruzara por el camino. JeonGguk aprendió que JiMin era especialmente un buen bailarín y eso lo tuvo fascinado de una forma que solo podía atribuir al alcohol en su sistema surtiendo algún tipo de efecto.