Amor de Instituto

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Instituto Arcus de Bellas Artes. 

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Kam y Romi eran amigas desde el jardín de niños, siendo Kam quién protegía siempre a Romi. Ambas estaban juntas todo el tiempo, apenas se separaban y nadie pensaba lo que causaría esto a Kam siendo la mayor de las dos. Ambas siendo pre adolescentes de 13 y 14 años respectivamente, notaron que era imposible separarse, sin embargo, Romi no veía más allá de lo que que Kam sí lograba ver. Su corazón latía sin control al estar junto a la menor, sabía que no debía tener esos sentimientos pero no la veía como una hermana menor sino como un posible amor: su primer y único amor. Romi solo se dejaba querer, no comprendiendo del todo lo que sentía también a causa de quien suponía solo era su mejor amiga, por lo menos para ese entonces.

Ambas se cambiaron de instituto a la edad de 14 y 15 años, haciendo amigas nuevas como Caro, Clemen, Lili y Claudia, para después lograr a incluir a una jovencita más pequeña y hermana de Caro, Cami. Todas eran casi como el equipo de Sailors Scout, se apoyaban y cuidaban de la más pequeña, siendo Kam quien le daba un cuidado mucho más especial haciendo sentir mal a Romi. La pequeña se aprovechaba para tener mejores notas, ser cuidada y pasar tiempo con ella, sabía que Kam la adoraba pero también notaba los sentimientos de Romi hacia Kam, notando que ella no se percataba aún de eso. Un día después de clases, Joshua se había acercado a Kam pidiendo un tiempo a solas para ellos dos y las chicas permitiéndoles aquello; Kam había vuelto y sin poder evitarlo soltó un suspiro de alivio y apoyó su cabeza en el hombro de Romi, enfureciendo de cierta manera a Cami.- Me pidió una cita, tuve que rechazarlo... Pobrecito.- Comentó Kam, haciendo que las chicas comprendieran la situación y dejando que Cami se ensimismara con aquella vista de Kam tan apegada a Romi.

Cami planeó una pequeña venganza, recordó que en casa su madre tenía dentro de su jardín flores para ella "prohibidas", ya que si se hacían en infusión podrían ser letales, y su instinto de vengarse y de ganarse el corazón de Kam la conllevaron a ello. Bajó al primer piso, aprovechó su soledad al estar en casa sola, y corrió hacia el jardín, entrándose a la zona donde no le tenían permitido. Su idea: tomar un poco de la planta, correr de vuelta a la cocina, infusionar esa planta y preparar con eso una bebida. Una especie de jugo natural color verde, el cual además de tener la infusión también tenía un poco de manzana, apio y una pizca de jengibre. Al terminar con aquello arregló sus cosas, escondió la botella, aprovechó de ducharse y corrió a su cama, el mañana iba a ser un largo proceso y aprovechaba el que Caro aún no llegaba a casa con sus padres.

Al otro día todas se habían reunido en clase de Educación Física, siendo la más agotada Romi. Kam le iba a ofrecer su botella con agua pero Cami como nunca se les acercó corriendo y le dio su botella.- Toma Romi, es un jugo natural preparado por mi, quería que lo probaras primero.- Cami había comentado tan inocente todo aquello, que después aprovechó de tomar la botella y despidiéndose se regresó a su propia clase. Finalizó la jornada de clases y Cami feliz de la vida había convencido a Kam para irse juntas, dejando ambas a Romi en el pasillo de la entrada con Claudia. A los minutos Romi empezó a sentirse mal logrando la necesidad de tener que irse a casa. Ya luego de aquellos sucesos todo había empeorado, Romi empeorando terminó yendo al hospital, falleciendo apenas a los 20 minutos de llegar. Todas las chicas al enterarse se sintieron mal, y con una Cami sintiéndose un poco culpable por lo que había hecho; sin importarle demasiado la situación trató de llevar en paz la vida junto a Kam, no logrando nada con aquello ya que ella seguía pensando en Romi.

Kam no quiso esperar, y sin pensarlo demasiado comenzó a investigar, esperó los resultados del por qué había muerto Romi y según sus padres había sido veneno, ya que le había desarrollado problemas desde su interior. Kam sorprendida por aquello, solo tenía que ver qué había comido Romi en esa horrible mañana, notando nada raro con todo lo que había pasado con ellas. Se sentía mal, culpable por no haber sido ella quien acompañara a Romi a su casa, no haberla llevado al hospital y no haberle alcanzado a salvarle la vida. Tenía el corazón roto y no podía pensar en nada más que no fuera ella.

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