Prometo

XLI

- 4

NARRA GAEL

Por primera vez en toda mi vida tenia algo realmente estable, por primera vez estaba seguro de alguien y por primera vez planeaba un futuro.

Hace unos meses Sara y yo hablamos, llegamos a una misma conclucion y hoy era oficial, desde hoy viviremos juntos, no se cuanto pueda funcionar esto pero mentiria si digo que no me hace feliz esta nueva aventura a su lado.

Tambien se presento la oportunidad y ahora estoy en mis ultimos meses como miembro activo del ejercito, me presentaron otras propuestas para continuar pero aunque eran atractivas las rechace, se cuanto sufrian mis padres pero mas Richie cada que era enviado a otros estados, luego de haber recibido un disparo Richie hacia berrinches para que ya no volviera a ir pero era algo que no decido asi que le prometi en la primer oportunidad dejar el ejercito y ahora lo estoy cumpliendo por el y porque quiero estar con Sara, quiero poder darle un futuro seguro y no uno incierto donde en cualquier viaje asignado puedo no volver, ella merece algo mejor que eso.

El dia pasaba con nosotros acomodando nuestras cosas en la nueva casa, habia cajas por todas partes cerca de las 7pm habiamos desocupado la ultima caja haciendo completamente oficial la mudanza, mientras Sara descansaba un poco fui al supermercado y prepare la cena, luego de cenar lave los platos y nos quedamos en la sala viendo una pelicula, un rato despues fui a la cocina por un bote de helado que compre y volvi con mi novia

Gael: ¿Quieres helado?
Sara: No
Gael: ¿Segura?
Sara: Si
Gael: Esta bien (comienza a comer el helado)
Sara: (lo ve) ¿Es de chocolate?
Gael: Si
Sara: Dame
Gael: No, dijiste que no querias asi que es mio
Sara: Dame (hace puchero)
Gael: Mio
Sara: Tambien mio
Gael: Tu no querias
Sara: Si quiero (hace puchero)
Gael: No puedo decirte que no (la besa)
Sara: (le quita el helado) Gracias
Gael: Creo que amas el chocolate
Sara: Ya deberias saberlo
Gael: Solo no comas mucho o te dolera el estomago
Sara: Shh (lo besa) es mio ahora

Un par de horas despues ya no quedaba nada del helado y mi novia tenia su carita llena del dulce, con una toallita humeda retire todo rastro de chocolate, se veia tan tierna.

Sara: Te amo (lo abraza)
Gael: Y yo a ti (besa su frente) ¿Ya te dije que amo tenerte en mi vida?
Sara: (se sonroja) Creo que tuvimos suerte de encontrarnos
Gael: Tal vez, estaba pensando que me falta muy poco para terminar mi tiempo como militar asi que podemos viajar a otros lugares
Sara: Siii, yo seria feliz de viajar contigo, podemos ir a Portugal, la comida es muy buena
Gael: Podemos ir a muchos lugares, no importa el tiempo ni el dinero si en cada lugar estas conmigo
Sara: Pienso igual
Gael: Te amo (la besa)
Sara: Pero no verias a tu familia
Gael: Tu pasaste años sin tener a tu familia cerca, realmente no pasa nada si no los veo un tiempo, ademas tu ya conociste a mi familia creo que es momento de que yo conozca y conviva con tu familia
Sara: Entonces tambien iremos a Francia, debes conocerla
Gael: Pero tendras que enseñarme frances, no soy muy bueno con el idioma aunque si entiendo algunas cosas
Sara: Claro, yo te enseño, no es muy dificil pero tu tambien debes enseñarme ingles, soy muy mala con ese idioma
Gael: Me parece un buen trato, tu aprendes ingles y yo frances
Sara: Si, asi podremos ir a Londres o Estados Unidos

Podia ver la emocion recorrer cada centimetro de ella y si se veia asi con solo pensar esos viajes no imagino como sera el verla en cada uno de los lugares que visitemos juntos, quiero verla feliz y hare cualquier cosa por conservar su sonrisa, el brillo en sus ojos y su emocion por conocer lugares nuevos y sinceramente recorrer el mundo a lado de ella es tal vez el mejor plan que pueda existir.

En general el futuro es incierto, pero lo unico que tengo seguro es que quiero estar con ella, no importa el plan, el lugar o el tiempo, yo quiero estar con esa chica amante del chocolate y quiero disfrutar cada segundo que pueda estar con ella, quiero vivir mil aventuras a su lado y hare lo posible por que ella sienta la misma comodidad.

Prometo que hare lo necesario para que cada segundo sea perfecto.