Nivel Experto-Kookv

*16*

~Un rato después~

-Y bien...mmm...te sientes bien Tae?-me sonrió de forma tierna-te duele alguna zona del cuerpo o algo así?

-le devolví la sonrisa de inmediato, realmente me hacía feliz que estuviera preocupado por mí-si, lo estoy...solo...tengo una pequeña incomodidad en el trasero pero no es para tanto...no te preocupes...-con mis manos apego mas a mi cuerpo su abrigo que estaba encima de mis hombros mientras me encontraba sentado ante el con mis piernas en forma de M-solo...me duele el hecho de que...en verdad no seas mío cuando yo si te pertenezco-dije en un tono bajo, esperando que no me escuchara-

-Vamos TaeTae, sabías como era esto...mas bien, lo sabes perfectamente, no pongas esa carita vale?-pellizca suavemente mis mejillas y se pone de pie, acto seguido comienza a vestirse-

-Si...lo se...-me pongo de pie e imito su acción-y...supongo que vamos a repetir esto no?ya que...a ambos nos gustó-mis mejillas se sonrojan levemente-

-Desde luego, cuando quieras-muerde suavemente mi labio inferior y termina de vestirse-mmm te importa?-dice tirando suavemente del abrigo encima de mis hombros-es que pues si te ven con eso puesto van a sospechar

-Ah-reí bajo-pues...tomalo, no hay problema-sonrio y se lo entrego-mmm mira Kookie...no se por cuanto tiempo pueda soportar esto...pero...haré mi mayor esfuerzo-camino hacia la puerta-

-Espera-me tomó de la mano y me acorraló contra la puerta-antes de que te vayas...dame un beso-dijo con una voz un tanto mas ronca de lo normal, y la forma en la que observaba mis labios hizo que me sonrojara-

-A-ah?por qué me pides eso ahora?por que querrías que te besara?si yo solo soy un sucio trato no?-bajo la mirada y el de inmediato elevó mi mentón para que volviera a mirarle y se acercó mucho mas a mis labios-

-Porque me gustan tus labios, además que mientras no salgamos de aquí nuestro tiempo juntos no termina-se acercó a mis labios y me besó repentinamente con intensidad y deseo, mordisqueando y succionando mis labios a su manera-

Luego de unos largos minutos nos separamos respirando de forma agitada, nuestros ojos conectaron nuevamente, mirándose con ardiente pasión.

-Bien, ahora escucha, saldré primero y luego de un rato sale también, te veré en la salida del hospital, en lo que mi suegro se queda con Ji-eun voy a llevarte a casa, debes de estar muy cansado por todo lo que ha sucedido...por cierto...tu pierna se encuentra mejor?

-Ah, si, bastante aunque aún me duele un poco, pero no es grave no te preocupes, las heridas no son tan profundas-sonrío-y no tienes que molestarte llevándome a casa, puedo ir en un taxi

-No, ni lo sueñes, no voy a arriesgarme de nuevo a que pueda pasarte algo, vamos conmigo si?-besó mi mejilla y luego salió del lugar-

-suspiro profundamente y me recuesto contra la puerta, deslizando mi cuerpo contra ella hasta quedar sentado en el suelo-dios....que acabo de hacer?se nota que estoy desesperado...como pude tan repentinamente aceptar ese sucio trato?-abrazo mi cuerpo estando en el suelo-aunque...me sentí bien estando con él...fue lindo y al menos...el hecho de tener mi primera vez con él se cumplió, es...es una lástima que yo solo sea un juguete en sus manos...-cierro mis ojos mientras pequeñas lágrimas se deslizaban por mis mejillas-

~Un rato después~

Pasaron aproximadamente 20 minutos hasta que decidí salir de esa cabaña, no iba a quedarme allí dentro para siempre y seguramente ya había pasado bastante tiempo como para que nadie sospechara acerca de lo que había ocurrido. De inmediato al salir de allí me dirigí hacia la entrada del hospital justo como había acordado con Kook, la verdad es que seguir pasando tiempo a solas con el me ponía algo nervioso, a pesar de que él ya me había teniendo a su merced igual no puedo evitar sonrojarme o avergonzarme cuando siquiera respira cerca mío. A pesar de que lo habíamos hecho suave mi trasero dolía un poco, era como si aún tuviera esa sensación de tener su miembro dentro de mí, era bastante incómodo para caminar a decir verdad pero con algo de esfuerzo logré llegar a mi destino, escuché unas pequeñas risas cerca de mí, risa que reconocí al instante y al levantar la mirada lo vi a él, esperándome recostado a su lujoso coche deportivo.