𖦹ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ ᴄɪɴᴄᴏ𖦹

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𝙲𝙸𝙽𝙲𝙾 𝙼𝙴𝚂𝙴𝚂 𝙳𝙴𝚂𝙿𝚄𝙴𝚂

Narrador Omnisciente:

A los chicos parecía irles bastante bien, habían ganado últimamente más "popularidad" entre la personas.
Fresh les parecía una persona muy en onda, Ink les parecía alguien chistoso y muy gentil con las personas.

A muchos les sorprendió el cambio repentino de Ink, más sin embargo no preguntaron y se alegraron, de una u otra forma.

Más sin embargo, al llegar a casa, Ink tenía que pelear con todas sus emociones. Extrañaba a sus padres, también a Dream, o bueno, a su energía positiva.

Y el hecho de estar a poco de cumplirse dos años de la muerte de sus padres y un año de que Dream había caído en coma, no ayudaba demasiado. Tenía que aprender a sobrellevar el sentimiento que eso le traía.

Por ahora todo iría bien. Se prepararía en esos próximos cuatro meses para la llegada de las fechas complicadas en su vida.

Nada podía salir mal.

O quizá sí, por la llegada de dos personajes peculiares.

(. . .)

Ink caminaba por las calles de aquella ciudad, sus clases habían terminado y Fresh iba a dar una vuelta con amigos como era de costumbre, él por ahora solo iría a casa y quizá se dedicaría a dibujar, o hacer algo por el estilo.


Había vuelto a retomar el gusto por las artes, más bien, había recuperado su pasión por las artes, y eso lo inspiraba mucho, le ayudaba a llevar su complicada vida.

Era una bonita forma de distraerse.

Pero por ahora solo pensaba en llegar a su hogar y quizá tomar una siesta. Solamente de ser muy necesario o encontrarse muy aburrido, cosa que últimamente era algo complicado.
Tenía tanto que sacar y tanto que transmitir.

Se vio interrumpido cuando escucho un sollozo lejano, más sin embargo el podía escucharlo, y de alguna forma podía sentir que algo estaba mal.
Se detuvo y miro a su alrededor, cerca de ahí había un callejón, parecía provenir de ahí, así que no dudo en acercarse y entrar.

Ink seguía avanzando por aquel oscuro callejón, los sollozos se hacían más presentes. Vaya fue sopresa al encontrar a un joven de vestiduras a blanco, negro y grices.
Parecía perdido, solo bastaba verlo como daba la espalda y como estaba en curva hacía él suelo.
Sus sollozos eran desesperados pero tan calmados a la vez, podía escuchar con cada respiro y jalón de aire que daba, estaba mal.

El joven pareció darse cuenta de la presencia del otro y se giro de inmediato para encontrarse a Ink. Su rostro estaba cubierto de lágrimas, más sin embargo, parecían ser lágrimas de sangre. Ink se asustó un poco y sintió que debía ayudarlo, así que se trató de acercarse a él, pero este se veía asustado y aterrorizado, así que retrocedió solo un poco, Ink se detuvo.

Ink decidió sentarse guardando su distancia, el chico lo miraba con atención.

- ¡Hola! Me llamo Ink. ¿Cuál es tu nombre?

El contrario lo miro por unos segundos, limpió sus lágrimas, se giro por completo mientras parecía ponerse cómodo y dijo finalmente con duda en su voz.

᪥𝚃𝚎𝚗𝚎𝚖𝚘𝚜 𝚚𝚞𝚎 𝚑𝚊𝚋𝚕𝚊𝚛᪥ [Mi Protector...]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora