Encuentro

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"Cosas de la vida, ahora nos cuesta saludarnos, cuando lo que antes nos costaba era despedirnos".

~Noviembre 2019~

Un día de invierno, recuerdo mis mejillas sonrojadas por el frío, mi bufanda que cubría todo mi cuello y mi abrigo grande y caliente, solo caminaba con un café en mi mano derecha no era fan pero de alguna manera me calentaba... lo único que pensaba era llegar a mi nuevo trabajo como fotógrafa y resguardarme del intenso frío.

Camine hasta que pude observar aquel edificio grande y alto en medio de la ciudad, el edificio era uno de los más importantes muy pocas personas lograban entrar ahí, yo fui una de esas personas, trabajé muy duro para llegar ahora se que todo el esfuerzo valió la pena.

Estaba por tomar la agarradera de la enorme puerta de cristal cuando alguien más la abre, ahí es cuando nuestras miradas se cruzan de nuevo después de mucho tiempo lo único que hago es mirarlo y el a mi sin movernos solo nos  mirabamos y es ahí cuando todos esos recuerdos vuelven a mi mente, aquellos buenos momentos como malos se esparcen por toda mi mente y lo único que pude hacer fue entrar al edificio y fingir no reconocerlo, podía sentir como me seguía con la mirada pero no voltee atrás no lo hiba hacer a pesar de que haya pasado tiempo seguía sin perdonarlo y se que el lo sabía.

~Septiembre 2008~

Me levante de mi cama para empezar a arreglarme, hoy era mi primer día día en la Universidad  New York Institute of Photografy una de las mejores universidades de fotografía que había, tuve que estudiar mucho y obtener buenas calificaciones para poder ganar una beca y entrar a esa universidad ya que mi madre no contaba con el dinero suficiente por lo tanto yo también tenía que trabajar en una cafetería cerca de mi casa para poder ayudar a mi madre con los gastos y ahorrar para pagar mi parte de la universidad.

Si se preguntan, no, no tengo hermanos o hermanas, mi padre falleció en un accidente automovilístico hace un año, la única familia que me queda es mi madre, fue un golpe muy duro al enterarnos de la muerte de mi padre, ella estaba trabajando y yo estaba en la escuela, cuando me dieron la noticia también me dijieron que mi madre se había desmayado al recibirla, por suerte no pasó a mayores, no soportaría perderla también.

Sin darme cuenta mis ojos estaban llenos de lágrimas, me las quite rápidamente y terminé de arreglarme, me dirigí a la cocina donde encontré una nota de mi madre que decía que se había ido a trabajar, no le di mucha importancia me dispuse a hacerme un desayuno sencillo para irme rápido a la universidad por suerte no quedaba tan lejos de mi casa y fácilmente podía irme caminando, ya estando en la entrada me detuve por unos momentos para respirar y tranquilizarme un poco, solté un gran suspiro y cuando estaba a punto de caminar siento como alguien choca conmigo y observó como su mochila y la mía caen al mismo tiempo.

-lo siento hiba tan rápido que no puede verte- dijo un chico de cabello negro un poco rizado, alto y con pequeñas pecas alrededor de su rostro, era lindo no hiba a negarlo.

-no te preocupes, no fue nada-
sin dejar que respondiera me fui rápidamente adentro de la universidad para encontrar mi locker e ir al auditorio donde empezarían las clases, no sin antes recojer mi mochila que curiosamente era igual a la de el.

Estando ahí nos empezaron a dar indicaciones horarios y otras cosas más que realmente eran muy aburridas además que no pude prestar mucha atención ya que mi mente no dejaba de pasar la imagen de aquel chico con el que había chocado, deje de pensar en él cuando derrepente todos empezaron a guardar sus cosa, sin saber porqué decidí preguntarle a una chica que estaba al lado izquierdo de mi.

-hola, perdona pero puedes decirme que esta pasando- la chica voltea su rostro hacia mi con una linda sonrisa.

-si lo que pasa es que el profesor ya terminó de decir su presentacion y nos dio un tiempo libre para que podamos conocer las instalaciones- lo dijo de una manera tan amable y linda, ¡esta chica me agrada!

-muchas gracias, oh! Se me olvidaba soy Nancy, Nancy Williams- le dije con una pequeña sonrisa.

-de nada, yo soy Estefania Jones, quieres que vayamos juntas a recorrer la escuela-
Con un poco de sorpresa asentí con la cabeza y ella rápidamente me toma del brazo y vamos juntas a recorrer la universidad.

Estando en el recorrido escuche como ella se quejaba de tener hambre.

-si quieres podemos ir a la cafetería- le dije manteniendo esa pequeña sonrisa en mi rostro.

-la comida de allí es muy cara ademas de que siempre está lleno- me mira de reojo
-no tendrás un poco de comida en tu mochila- por suerte había guardado dos pequeñas barritas de granola y chocolate por si no alcanzaba a comer.

-creo que si deja busco- abrí mi mochila y extrañamente no había ningún objeto que reconociera y el celular que estaba ahí no era mio ademas de que tenia llamadas perdidas de mi numero decidí tomar el celular y marcar a mi numero, espero unos cortos segundos hasta que alguien contesta.

-hola, lo siento creo que agarramos las mochilas equivocadas al chocar en la entrada- era la voz de aquel chico.

-si ya me di cuenta, en donde podemos encontrarnos para que me des mis cosas y yo las tuyas- se lo dije tan rápido, solo quería mis cosas devuelta.

-ah si que te parece en la azotea que esta en el ultimo piso- se escuchaba un poco nervioso, estará bien??

-de acuerdo ahí estare- corte la llamada, en eso me percate de Estefania que me miraba de manera curiosa, solo levante mis hombros restándole importancia y le pedí que me acompañará a la azotea, en el camino le empezá a contar la situación y ella lo único que hizo fue reírse yo la mire de mala manera pero al final también terminé riendo con ella, cuando ya llegamos a la azotea pude ver al chico con el que había chocado venía acompañado con otros 3 chicos no le reste importancia y camine hacia el.

-ten, ahora dame mi mochila- le extendí la mochila que yo traia el la tomo y me dio la mía, Cuando estaba apuntó de darme la vuelta siento como me toma del brazo.

-espera, no me has dicho tu nombre- dijo con una sonrisa - yo soy jackson- me miro esperando a que le dijera mi nombre.

-no me interesa saber tu nombre y a ti no te interesa saber el mio solo nos devolvimos las mochilas y ya, adiós- sin mas me di la vuelta tome a Estefania del brazo y nos fuimos para regresar a nuestras clases por suerte aún los chicos de nuestro grupo seguían afuera.

Mentiras Que MatanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora