Pelador; luciale

IV

Solo dos golpes directos y continuos fueron necesarios para que se abriera la ceja de Alex. En respuesta, Alex,se inclino levemente y atinó dos ganchos izquierdos en el abdomen  igual o incluso más rápidos, el contrincante de quedó sin aire y ahí es cuando aprovecho a molerlo a golpes para que cayera hacia atrás perdiendo el conocimiento. Alex quiso agarrarlo de la camisa y seguir golpeándolo pero Dani se apresuró a tomarlo de abajo de los brazos para jalarlo hacia atrás.

—Ya Alex, ya está.

Los bullizos llenos de éxtasis hacían solo que la cabeza de Alex diera vueltas.

—Agua. — Dijo en un hilo de voz pero que alcanzó a oír Daniel.

Ayudado por Daniel, se sentó en un bloque de concreto y le paso una botellita de Agua que Alex no dudó en acabarla.

—¿Cuánto llevamos?

El chico de rizos sacó un pequeño fajo de billetes y los contó rápidamente. — Trecientos dólares, cerrados.

Alex quiso maldecir pero un dolor punzante en su abdomen no se lo permitió. Se quitó la playera para ver los daños de las tres peleas que había hecho. Moretones viejos se combinaban con nuevos, el morado se difundía con tonos amarillentos. Se tanteo con presión para rechazar cualquier signo de costillas rotas o daños internos, cuando llegó a nivel de sus pechos noto como las cicatrices casi no se veían por los daños que había recibido, algo en él se sintió feliz, ser lastimado no tenía tantas cosas malas, de alguna manera se sentía un hombre completo cada que recibía un golpe o noqueaba a un oponente. No le gustaba , no sentía placer en lastimar a otros pero, odiaba recordar el pasado, solo luchando se concentraba en el presente y en el futuro, solo importaba para donde esquivar y hacia que dirección golpear.

—Sigamos pues,  la noche apenas empezó.— Alex sonrió parándose y botando su playera ensangrentada y rota al suelo.

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Cuatro de la mañana y Alex solo había hecho 800 dólares, estaba enojado. En 7 peleas en total solo logró sacar esa cantidad. Estaba completamente herido, solo seguía en pie por la impotencia que le daba que no lo dejaran seguir participando, "vete a descansar chico, tus movieminto ya no nos entretienen" le dijo el organizador, era verdad, estaba cansado y cada que se movía su cuerpo inconscientemente se contraía por el dolor. Observo a su alrededor, a los causantes de que solo había reunido 800 dólares en una noche, vagos, adolescentes, unos no más grandes que Alex, en su mayoría,  publico sin ningún quinto.

— Ya vámonos Alex, en tres horas tenemos escuela y tu tienes práctica después. — Dani insistía por quinta vez en la noche.

Ahí estaba, su verdadera razón por la que no estaba ganando más esta noche, pudo haber pasado a ligas mayores , clubes privados donde gente pudiente con ganas de ver hombres lastimandose entre sí les gustaba y llegaban a pagar cantidades absurdas de dinero. Se negó cuando se le presentó la oportunidad, ¿la razón? La temporada de futbol, los racoons estaban a nada de no llegar ni a semifinales, Alex todos los días llegaba con nuevos moretones a la escuela haciendo que su desempeño en el campo bajara. El entrenador le hizo prometer que cualquier cosa en la que estuviera que lo dejara así se tenía que acabar o su carrera de jugar junto con la beca que le prometió en su primer semestre o cualquier otro sueño que tuviera se acabaría primero. Obviamente sedio y pudieron ganar la temporada pasada.

—No,Dani, otra, solo una más, déjame hablar con el organizador. —Dani se puso adelante de él, casi abrazandolo para que no diera un paso más.

—¿Niño, podemos hablar?

Alex volteo a ver a la persona que le hablaba y vio que era el mismo trajeado de ayer.

— ¿Qué sucede? ¿Ya no te dejan pelear? — Supo como llamar la atención de Alex.