🐙; 𝐁𝐄𝐁𝐄

🐙; 11

─ ¿Puedo entrar?─ tocó suavemente la puerta de la ahora habitación de Felix.

─ Sí.─ susurró lo suficientemente audible para que Changbin escuchara.

Entró a la habitación y se encontró con un relajado Felix meciendo a su bebé sentando en posición de loto en el centro de la cama. Fue la escena más tierna que pudo haber visto en su vida.

─ La comida ya esta lista.─ dijo haciendo señas hacia las escaleras.

─ Voy a seguir mesiendo un rato a Daehwi y bajo a comer.─ dijo con su voz tan suave, con cuidado de no despertar al pequeño que dormía en sus brazos.

─ Esta bien.

Changbin bajó al primer piso y acomodó de nuevo todo en la mesa, quería que todo se viera bien para Felix. Se sentó en la mesa y esperó al chico para empezar a comer.

Luego de unos minutos Felix bajó con su pijama puesto, que consistía en una camiseta negra simple y un pantalón de estampado de gatos. A penas eran las 7:30, pero eso era lo de menos.

─ ¡Oh por dios esto parece un banquete!─ exclamó Felix sentándose al frente de Changbin, pareciera que se le fuera a caer la baba de lo deliciosa que se veía la comida.

─ Jaja, no suelo cocinar mucho, pero esta es una ocasión especial.─ rió rascando su nuca.

─ ¡Muchas, gracias, de verdad no tenías que molestarte tanto preparando esto!

─ No, no te preocupes, no es nada. Mejor empezamos a comer, que la comida se nos va a enfriar.

Felix asintió y los dos empezaron a comer.

Lee metió un pedazo de carne en su boca y en sus cansados ojitos nació un fuerte brillo, estaba delicioso. Felix llevaba tiempo que no comía aquel tipo de carne, eso era todo un lujo para él.

─ ¿Te gusta?─ preguntó Changbin tapando su boca para poder hablar, todavía tenía comida en su boca.

─ ¡Sí, eta' muy rico!─ murmuró Felix, aún estaba masticando la carne y por eso no pudo hablar del todo bien.

Changbin rió, se veía muy tierno, él era tierno en todo lo que hacía, ¿Cómo se podía ser tan tierno?

─ Tenía tiempo que no comía así de bien. ─ tomó un bocado de verduras.

─ Pues tienes que comer bien para alimentar bien a tu bebé.─ tomó un sorbo de su jugo.

─ Eso es lo que debí hacer cuando estaba embarazo, ¡habían probabilidades de que Daehwi no naciera bien desarrollado! Pero gracias a Dios nació completamente sano.─ sonrió recordando la primara vez que cargó a su bebé cuando era un recién nacido.

─ Oh, pero igual tienes que seguir alimentándote bien.

─ Lo sé.─ suspiró.─ Pero siento que Daehwi va a hacer un niño muy gordito, ¡se la pasa pidiéndome pecho a cada rato! se que es normal, todavía esta pequeño y tengo que alimentarle, pero a él no le gusta la leche de fórmula, he intentado darle en su biberón pero nunca se lo bebe.─ volvió a suspirar cansado revolviendo los hielos de su vaso.

Changbin no sabía que decir, nunca había tenido que hablar sobre esto y sus conocimientos del tema eran escasos.

─ Bueno, yo tengo una amiga que es madre, se llama Jisu. Ella me contó una vez que se puso mostaza en los pezones y el bebé dejo de pedirle el pecho como antes, pero eso lo hizo cuando el niño tenía un año y medio, creo.─ dijo dudoso vagando en sus recuerdos.

─ Definitivamente voy a hacer eso cuando Dae crezca.─ rió mostrando su hermosa sonrisa.─ Pero por ahora voy a seguir dándole pecho. Leí en una guía de madres primerizas que eso es CRUCIAL para crear un lazo en la relación madre-hijo.─ expresó para finalizar bebiendo un poco de jugo.

─ Y ehmm, ¿qué hay del padre de tu bebé? Nunca me lo has mencionado. ─ Changbin no iba a mentir, quería saber que era de la vida del causante de la tristeza de Felix y de que tuviera que lidear el solo con su hijo.

─ Ah.─ suspiró y hubo incómodo silencio.─ abusaron de mi, Changbin. No tengo ni la más mínima idea de quién es el padre de mi bebé.─ susurró lo último, quería sonar fuerte hablando acerca del tema, pero siempre se le partía el alma al recordarlo.

Changbin observó los ojitos llenos de tristeza y pesadez de Felix, sus profundas ojera de cansancio. Se le rompía el corazón al verlo así, tan débil, pasar de una faceta feliz y contenta a esta.

─ ¿Quieres un abrazo?─ preguntó con preocupación en su rostro. Felix asintió con ojos llorosos.

Changbin se levantó y Felix también. El mayor envolvió en sus brazos el delgado cuerpo del más pequeño dejándolo sollozar en su pecho.

─ Perdón por recordarte aquello.─ Changbin se separó del menor.

─ No se preocupe.─ limpió sus lágrimas con su muñeca y sorbió su nariz.

─ ¡Si me preocupo, Felix! ¿Por qué nunca lo denunciaste?

─ ¡No tenía el valor, Changbin, no tenía a nadie quien me apoyara!─ lágrimas siguieron cayendo de sus ojos.

─ Felix, todo va a estar bien, yo estoy contigo y te voy apoyar. No vas a estar nunca más solo en esto de ser padre, yo, yo voy a ayudarte.─ volvió a abrazarle y Felix se aferró a su pecho.

─ Gracias...

Lo único que necesitaba era un abrazo y aquellas palabras tan hermosas de Changbin.