Capítulo 2.

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Y así, con un tremendo dolor de cabeza me levanté de la cama, tomando mis cosas, que no era tonta y las había preparado ayer.

Mierda, lo que hice está mal, ese chico estaba buenísimo, pero vamos, tampoco está tan mal.

Y cuando llegué, de la mierda, olvidé que era entrega de boletas, por lo que había una bolita acumulada al rededor de las mesas.

Creo que las recogeré mañana, digo, sé que voy bien así que no voy a preocuparme por algo tan simple.

-¡BILLIE! -Gritó Noah a lo lejos acercándose - ¿Te enteraste? Hay nuevos, y bueno... Te diría vamos a ligar con ellos pero -Rió dulcemente y Danielle a su lado le dio un golpesito, que por cierto ¿Cuándo mierda llegó? -.

-No no, chicas, "La que no es puta" -Comencé a decir, mmm, si. Si soy de esas pero no al extremo de acostarme con un desconocido, ¡Vamos! ¡Que soy virgen!- "No disfruta" -coreamos todas y nos hechamos a reír, si, eramos populares, ya saben, caerle bien a la mayoría y a los que no, bueno, envidias -.

Caminó a su primera clase del día, como desearía que fuera domingo. Los amaba.

Dos polos opuestos, ella amaba los domingos, y el los odiaba porque... Seguro ya sabes porqué, los domingos son los días suicidas, y así como el odiaba los domingos ella odiaba los días soleados y el los amaba. Dos almas destinadas a encontrarse.

Dos almas doloridas por lo mal que la pasaron anteriormente, y es que, aunque Billie fuese la chica más alegre que podías conocer, le había costado tanto llegar ahí, que la vieras sonreír al mundo como si nada, porque en el pasado sonreír dolía.

Y ahí estaba, haciendo ruido con el lapizero, viendo la libreta fijamente, perdida en sus pensamientos, con sus recuerdos con un poco de café en un termo a su lado. Un café con poca azúcar.

Tomó un sorbo, aún pensando en todo lo que pasó.

-Jodete, no voy a volver, nunca pensaste que daría la vuelta y diría que es muy tarde para pedir perdón, mamá. Pero lo es, porque tus palabras ya me hirieron, porque me cansé que me trates como si sólo fuese un objeto. Tengo sentimientos ¿Sabes? ¡YO SIENTO MAMÁ! -Gritó con la voz rota y los ojos cristalinos, además de varias lágrimas escurriendo rápidamente por sus mejillas- Y lo quieras o no, si no puedo dedicarme al baile lo haré a la música, porque es lo que me gus-

-¡ESCUCHAME BILLIE! ¡¿Tú crees que es fácil ser madre!? -Soltó su madre rabiosa- ¡NO LO ES! ¡CLARO! ¿¡TÚ, UNA ADOLESCENTE, QUE VA A SABER DE DOLOR SI NO HA VIVIDO NADA!? -Listo, esa fue la gota que derramó el vaso-.

-¡SÉ MÁS QUE TÚ, PORQUE LO SIENTO AHORA Y PORQUE TODA MI PITA VIDA LO SENTÍ Y TU NUNCA LO NOTASTE! ¡Si tanto me odiabas me hubieras abortado. ¿Tanto te costaba? O mejor aún usar-

Una fuerte cachetada resonó y todo quedó en silencio, sólo sintió la mano fría de su madre estamparse contra su mejilla. Y después el ardor la invadió. Dio media vuelta y corrió escaleras arriba, encerrándose con llave en la habitación rápidamente, era el colmo.

-¡NUNCA ME ESCUCHAN! ¡SOY HUMANA! ¡SIENTO JODER, SIENTO! -Exclamó entrecortadamente por los sollozos que salían de su garganta, y las lágrimas calientes le hacían nublar la vista-.

(...)

-Puedo fingir una sonrisa, si eso es lo que quieres, puedo forzar la risa, pero sólo soy humana, mamá, siento igual que todos. Y por una vez, escucha todo lo que tengo que decirte antes de gritarme.
-Habló lo más calmada, sin poder llorar, porque estaba tan triste que no podía hacerlo- Por una vez. Escuchame. Escucha mi voz.

A Tu Lado (Tyllie) #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora