Efecto Mariposa. [L]GTB

Tic, Tac...

'Mi cabeza es un mundo que aun intento descubrir.' 

—Alhena.

Cuando entre en este mundo oscuro, Marcelo Aparicio me cogió de la mano una tarde, me llevo por su enorme jardin caminando en silencio y pensé que me guiaba hasta un agujero hecho para mí. Sin embargo, me dijo que me daría una lección importante sobre mis enemigos. De nuevo me hizo pensar, no tengo enemigos, le dije. Él me respondió, los tendrás. Una mente brillante despertara malestar en los no tan brillantes. El éxito, trae consigo la envidia y desprecio. Y la traición, espérala de quien menos crees.

¿Qué haré con mis enemigos? Y su respuesta fue, muerte. Con la muerte no hay peligro, no hay miedo alguno de que te persigan y puedes andar libre. Muévete en silencio. Que tu ataque sea mortal. Definitivo. Igual que un jaque mate. Pero nunca, nunca, subestimes a nadie. Incluso los bocados pequeños atoran.

Ese fue mi error. Mi grave error.

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El rojo predomina en la habitación, y está lejos de ser la habitación roja de Christian Grey. Artemisa miraba a través del reflejo del espejo, a una distraída Rose caminando por la habitación tamboreando con sus dedos la madera de la cómoda sin llegar a tomar los objetos que allí se encontraban. Cuando algo llamaba demasiado su curiosidad, fijaba su atención volviendo más lento el tamboreo de sus dedos. Terminaba con un golpe seco sobre la madera al saber que no sería bien visto tomarlo.

Los perfumes abrumaron su atención, la estética forma en que estaban ordenados y la escalofriante que era ver casi todos sus perfumes favoritos allí en especial el Organza.

—¿Usas todos estos perfumes? —Se inclinó mirando de cerca que tanto uso le han dado.

—A veces —Respondió Artemisa jugando con sus manos nerviosas.

—Este es mi favorito —Señalo Rose con su dedo—. ¿Por qué lo tienes aquí? ¿Es por mí?

—¡No! —Chillo rápido—. A mi también me gusta.