Proyectos 707 y 606

II

Pasaron dos semanas, la situación entre EEUU y Rusia era tensa, ninguno de los dos países había atacado al otro, todo era paz hasta que el teléfono de Lukyam sonó.

Moscú, Rusia

—¿Sí?—Preguntó el hombre al ver que el número que llamaba era desconocido.—Oh, fantástico. Nos vemos allí esta tarde.—Colgó.—¡______! Alfa y Beta ya tienen tu identidad falsa.—La chica salió de su habitación.

—¿Ya? ¡Qué bien!—Dijo con entusiasmo.—¿Cuando la recibiré?

—Esta tarde iremos al bar del otro día, así que vete preparando.

—Vale.—La chica volvió a su habitación para prepararse.

Pasaron unas horas y ambos estaban de camino al bar.

—Antes de que entremos ahí quiero decirte que estás a punto de comenzar tu aventura en solitario y espero que seas capaz de completar la misión. No quiero que te sientas presionada, no quiero que te sientas mal por no cumplirla en caso de que algo salga mal. Tan solo quiero decirte que estaré orgulloso de ti pase lo que pase.—Le dio un beso en la frente y ella sonrió.

—Pase lo que pase te prometo que triunfaré, padre.—El hombre sonrió al escuchar que su hermosa creación le había llamado padre.

Después de este emotivo momento, el dúo entró al bar y se encontró con el par de hackers.

—Alfa, Beta, buenas tardes.—Saludó Lukyam.

—Buenas tardes.—Dijo Alfa, con su característico tono frío de voz.

—¿Puedo ver la identificación?—Preguntó Lukyam.

—Claro que sí, pero debo decirle una cosa.—Hizo una pausa.—Hemos pensado que si vamos a Estados Unidos con ella, la misión tiene un 30% más de posibilidades de que salga bien. Si estamos cerca podemos tener acceso directo a lo que ella nos traiga.

—Suena bastante bien, no te voy a mentir. Informaré al presidente sobre vuestra incorporación en la misión.—Tanto Alfa como Beta asienten y le dan la identificación falsa a ______.

—¿Cuándo nos vamos?—Preguntó _____.

—Tu vuelto hacia Washington DC sale este viernes, haré una llamada para ver si quedan vuelos.—Sacó el móvil y se levantó del asiento.—Dadme cinco minutos.—Salió fuera del local, ya que dentro había bastante sonido.

—Bueno...Ya que vamos a ser compañeros de viaje, ¿por qué no me decís vuestro verdadero nombre?—Preguntó la chica con una sonrisa inocente. Tanto Alfa como Beta se miraron y asintieron.

—Mi nombre es Jumin y ella es mi acompañante Jaehee. Como sepa que nuestro nombre lo sabe alguien más, me va a dar igual nuestra queridísima patria Rusa, te mataré.

—Qué gracioso eres, Jumin.—La chica se rió y de la nada se puso seria.—Ni un millón de humanos insignificantes podrían conmigo.—Jumin se quedó callado y Jaehee tan solo miraba la escena, con algo de miedo.—Pero tranquilos, soy de fiar, nunca rebelaré vuestros nombres.—Dijo con una de sus características sonrisas. Lukyam entró al bar de nuevo.

—Os he conseguido plazas para el vuelo del viernes, así que id haciendo las maletas.—Dijo el hombre mientras guardaba su teléfono móvil en un bolsillo.

El día llegó y el cuarteto se dirigía al aeropuerto, con todo preparado para aquel emocionante viaje.

El vuelo estaba a punto de embarcar, era el momento de despedirse.

—Recuerda lo que te dije el otro día, pequeña. No importa si fallas, siempre estaré orgulloso de ti.—Lukyam abrazó por última vez a _____.

—Te quiero, padre.

—Y yo a ti.—Le dio un beso en la frente y los tres jóvenes se dirigieron hacia su avión.

Tenían tres asientos juntos, ______ en el lado de la ventana, Jaehee en medio y Jumin en el lado que daba al pasillo.

—¿En serio me tengo que sentar yo aquí?—Preguntó Jumin, claramente molesto.

—Sí, ahora cállate.—Le contestó Jaehee.

—Luego el borde soy yo...—Resopló el azabache.

—¿Quieres la ventana?—Preguntó _____, queriendo resolver el conflicto y que ambos se callaran.

—¿La ventana? ¿Tú quieres que me dé algo?—Dijo molesto.

—¿Te han dicho alguna vez lo molesto y tiquismiquis que eres?—Suspiró.—Disfruta del pasillo, imbécil.—_____ al ver que no contestó se dedicó a mirar por la ventana, pensando en su padre.

—Ya me cae bien.—Comentó Jaehee con una sonrisa.

Eran las siete de la mañana, por lo tanto llegarían a Estados Unidos sobre las diez de la noche. Jaehee se dedicó a dormir casi todo el vuelo, Jumin no paraba de quejarse pero como vio que nadie lo escuchaba se calló y se puso a leer, mientras que _____ no paraba de pensar en cómo estaría su padre.

Había sido un viaje bastante largo, nueve tediosas horas de vuelo que parecían interminables.

Al salir del aeropuerto cogieron un taxi que los llevaría a su nueva vivienda provisional, tenían el dinero suficiente para una vida de lujo allí, pero obviamente optaron por una vida normal. Alquilaron un piso en un barrio tranquilo de Washington DC, era un piso bastante amplio con tres habitaciones.

_____ ya estaba inscrita en las pruebas de acceso para el FBI, hackearon el sistema para ponerle una nota alta en el examen teórico, que obviamente no había hecho, pero el examen físico lo tendría que hacer sí o sí. Las pruebas eran dentro de una semana.