"nadie murió por Jesús" la bebida comenzó a añejarse, la comida era inservible en este caso. Necesidad de amor, fue un golpe para comenzar con mi extraña relación.
Ojos oscuros me observaban nuevamente, mis sentidos renacieron, ¿Era malo tener una relación con la mujer que amas? Seguía amarrada, no respondia, solo me miraba; una mirada hermosa digna de conservar.
Entrar en detalle dañaría lo especial que fueron aquellos momentos, su piel, su boca, sus ojos aquellos ojos que iniciaron todo.
Vacio, un nuevo sentir se instauro en mi ser, deseo de verla. La melacolia de no tenerla a mi lado inicio un trance en mi ser, corrí por las calles culpando a todo ser que tenía vida de ser quien se llevo mi vida concentrada en una chica.
"Señor, si tu supieras cuanto amo a ese cuerpo, cuanto amo esos ojos me tildarías de moustro pero ¿no puedo amar como todos, le tendrías miedo a un tonto amante?"
Logré escapar de los que me querían separar de la felicidad.
Agotamiento, mi cuerpo dejaría de responder en una semana, recosté mi cuerpo en el colchón sin arreglar, poco a poco fui cediendo a la necesidad humana de descansar.
Manos frias, olor a flores silvestres, piel sencillamente suave y caliente hizo contacto con mi torso desnudo; conocía muy bien su piel pero el hecho de que sintiera su aliento cerca de mis labios, leves elevaciones de pecho y tacto por parte de ella me llenaba de dudas las cuales quería resolver; la euforia embargo todo mi cuerpo, necesitaba disfrutar este momento.
Estaba viva, Wendy estaba viva.
"La necesito cerca de mi" palabras pasadas quedan en mi cabeza. ¿Cómo es que no murió el día que por necesidad abuse desde lo mas profundo de ella?