Capítulo 2
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Eran las siete y media de la mañana. El cielo estaba cubierto, gris, pero no hacía frío.
El Uzumaki se encontraba caminando por un sendero que llevaba hacia la escuela. Todo estaba en absoluta calma y silencio, sólo perturbado por el suave y constante viento azotando débilmente las ramas de los árboles. En el ambiente flotaba un fuerte olor a humedad que anunciaba una inminente tormenta.
-(Si hubiera sabido que tenía que levantarme temprano todos los días para ir a clases.... nunca hubiese venido)- El rubio ahogó un bostezo y se acomodó mejor la mochila en el hombro -(Creo que nunca me acostumbraré a esto)-
Por el norte, en la lejanía, por donde más predominaba la negrura del cielo, se podía ver el leve resplandor e intermitente de relámpagos silenciosos mientras el sonido del viento se incrementaba lentamente. segundos depués se empezó a apreciar el sonido de los truenos, muy débil y amortiguado por la distancia.
-(Genial-ttebayo, lo que me faltaba...)-
-¡Naruto-san!-
El Uzumaki detuvo sus pasos y miró hacia atrás. Era su amigo.
-Hola, Tsukune- El mencionado dejó de correr y se paró a su lado, jadeando entrecortadamente -Pensé que ya estabas en la escuela-
-No, hoy me he levantado más tarde de lo normal- La respiración del pelinegro volvió a ser normal, se rascó la mejilla y se rio -Ni siquiera he tomado el desayuno-
-Bueno, ya somos dos- El rubio hizo su clásica sonrisa y reanudó su camino -¿Qué te parece si a la hora del receso vamos junto a Moka-chan a comer algo en la cafetería de la escuela? Yo invito-
-Ah, gracias..- Tsukune comenzó a caminar a su lado -Pero la próxima invito yo, eh, no voy a dejar que pagues de nuevo-
-Nah, no te preocupes por eso- Naruto cruzó los brazos detrás del cuello y sonrió -La comida de la cafetería está muy barata, además tú y Moka-chan comen muy poco, sobre todo ella-
Tsukune miró inexpresivamente a Naruto -Moka-san come poco porque prefiere beber tu sangre-
-Puede ser, jeje-
El pelinegro dejó de mirar a su amigo, y levantó la vista brevemente. El cielo se estaba poniendo más oscuro -Hablando de Moka san- Se rascó la nariz, estaba un poco nervioso -Tengo que decir que aún me cuesta creer que ella es un vampiro...-
Naruto enarcó una ceja -¿No te bastó lo sucedido con la mierda de Saizou?-
-Solo han pasado dos días desde aquello...... Todavía tengo problemas para asimilarlo- Tsukune dejó de rascarse la punta de la nariz, y volvió a mirar a su amigo, o más precisamente, el cuello de su amigo, donde habían estado los colmillos de Moka -Dime una cosa, Naruto-san. ¿No tienes miedo a morir desangrado?-
El Uzumaki entendió lo que quería decir, y le sonrió para tranquilizarlo -No, mi sangre se regenera a la misma velocidad o mayor de la que Moka-chan consume-
-¿Eres capaz de regenerar tu sangre?- Tsukune parpadeó varias veces, luego sus ojos se iluminaron, recordando algo -Es verdad, se me había olvidado. ¡Tú también eres un monstruo!- Tan pronto se dio cuenta de lo que había dicho, se tapó la boca con la mano y se quedó mirándolo en silencio, temblando internamente por una posible reacción agresiva -L-lo siento, N-naruto-san. No quería insultarte-
-Nah, descuida- Naruto le restó importancia con un gesto de la mano -Pero te aconsejo que tengas mucho más cuidado con lo que dices o haces. Los otros "estudiantes" no dudarían un segundo en arrancarte el hígado-
