La verdad es que esta cuarentena emocional y físicamente ha sido un golpe de realidad bastante abrupto. Supongo que siempre me había escudado dentro del mundo de las excusas para evitar el contacto prolongado de mi familia y al mismo tiempo evitar mis responsabilidades y esquivando el entender que me pasa en mi cabeza y que le pasa a mi entorno.
Ha decir verdad supongo que nunca fui consiente de lo toxico que puede llegar a ser un familiar para ti. Es frustrante y estresante he inconsciente a tal punto en que solo te das cuenta cuando eres lo suficientemente despejado para entender que esta pasando.
Sinceramente, me desmotiva estar rodeado de personas pero últimamente me pregunto si eso es otra manera en que mi cerebro busca entrar al mundo de las excusas.
No obstante, creo que mi hermana tiene razón, rara vez puedo darme el lujo de decir eso, empezar una rutina seria genial, acostarse temprano sería genial, controlarse sería genial.
He estado en un bucle de intenciones y mala salud mental y no puedo responsabilizar de todo eso a mi entorno.
Aunque quiero mantener la fe de que mi mente no este tan mal para ser algún tipo de depresión (tengo la necesidad últimamente de querer ir al medico)
Voy a repetirme lo siguiente: puedes equivocarte y hacer un buen trabajo para ti y los demás, estarás bien.
ESTÁS LEYENDO
Letras del corazón
No Ficciónpequeñas palabras, frases e historias que salen del corazón