Una vida de a mentiras.

Capitulo II. Mi bello mundo.

"Que linda mañana, mi madre me preparo un rico desayuno y de ahí me llevaría a la escuela a pesar de que somos una familia de nivel promedio soy muy feliz porque tengo a mi mamá y a mi papá y ellos me apoyan en todo.

-¡¿Amor ya estas lista?!, tu mamá ya termino de hacérte el desayuno- grito mi padre

-¡Un momento, ya voy!- grite desde la parte de arriba

Tome mi celular, mi mochila y baje a desayunar.

-Buenos días madre- besándole la mejilla al igual que lo hice con mi padre.

-Ya te dije que no me gusta que me digas madre, suena muy feo, se oye un poco frío-dijo con un tono de seriedad y risa.

-Esta bien ya no te diré así... Madre jajajaja-lo dije para fastidiarla un poco.

Desayune lo que mi mamá tan rico había preparado para mi. Ella ya había terminado, me lave los dientes mientras ella iba al auto. Me despedí de mi padre y salí con ella.

Siempre que mi madre me lleva me la paso platicando de lo que siento por Uriel y me da consejos y me orienta para cuando yo comience una relación.

Llegamos a la escuela muy puntuales, me despedí y baje del auto donde ya me estaban esperando mis amigos.

A pesar de ser una chava con gustos diferentes al de algunas chavas, a la gente le caigo muy bien por mi actitud y la verdad tengo muchos amigos.

Cuando llegue al salón paso algo de verdad muy lindo... "

-¡Ring!, ¡Ring! -sonó la maldita alarma

Desperté y como era de suponerlo tenia que arreglarme para ir a la escuela.

-¿Por qué rayos me pasa esto a mi?- dije en mi mente.

Tome una ducha y de mi ropa saqué un pantalón negro, una blusa de tirantes blanca y mi camisa a cuadros negra. Agarre mis converse negros.

Ya que tengo el cabello un poco rizado lo plancho pero solo del fleco para que se vea muy bien.

Baje a desayunar no sin antes arreglar mi habitación y tomar mi mochila; apesar de que mi papá contrato a los que hacen el aseo me llevo muy bien con ellos ya que son las únicas personas que están conmigo y me escuchan y por eso no les aumentó el trabajo con algo que puedo hacer yo.

Baje y Horacio, el chófer me estaba esperando en el auto. El es el que siempre me pregunta por como me fue en la escuela y eso es lindo ya que mi padre no lo hace.

Ya en la escuela tome mi lugar y me puse los audífonos y escuche música. Cerré los ojos y continúe imaginando lo que había dejado pendiente

"Cuando llegue al salón vi algo verdaderamente lindo era... "

***************************************
¿Qué paso con Samantha?

Bueno si les gusta la historia no olviden votar y comentar que les parece
Besos.