¿Bailamos, Potter? (Drarry)

Prólogo

Todos piensan que tú y yo somos los peores enemigos jurados a muerte, pero no es más que una ruin actuación, ya que si nuestras familias supieran de esto se opondrán con uñas y dientes a que nosotros estuviésemos conviviendo sin matarnos.

El primer día que te conocí me comporté como un idiota ante todos, quería impresionarte y ser notado, eras el niño que vivió, todos conocían tu fama, y siendo mi apellido bastante conocido por ser un sangre pura, supuse que te harías mi amigo al instante, ya que nadie me negaba nada, excepto tú, me humillaste ante todos y me rechazaste públicamente, por ese momento no supe como responder, no tenía sentido aunque si me dolió bastante aquella acción.

Ese año fue extraño y complicado por todos los cambios que pasamos y los "inconvenientes" provocados por las criaturas mágicas, pero a pesar de esto tuvimos breves momentos en los que cuales pudimos convivir sin apariencias ni máscaras encontrándonos solos en los pasillos y cruzando breves palabras, después de esto decidiste darme una segunda oportunidad para ser amigos, la mejor decisión de mi vida.

Segundo y tercer año trajeron nuevos frutos a nuestra relación de amistad, hablábamos poco, ya que solo nos veíamos las noches de los fines de semana, para evitar que los demás nos vieran, durante este tiempo nos dimos cuenta de las consecuencias que estas acciones podrían ocasionarnos la muerte, ya que mi familia era fiel aliada al señor oscuro.

Aun con estas circunstancias, decidimos seguir conociéndonos, compartiendo historias, anécdotas y sentimientos de nuestras vidas, esto hizo que te tomará un cierto cariño por tu amistad y apoyo sincero, jamás lo diría en voz alta claro está, eras diferente, me enseñabas de tu mundo y podíamos ser tan solo dos personas sin la presión de lo que la sociedad quería que fuéramos, haciendo que las heridas que a ambos nos habían marcado no fueran tan dolorosas.

Pero en nuestro cuarto año todo se puso interesante y a la vez extraño para mi, debido a las benditas hormonas que nos abordan y molestan a esa edad, yo comencé a tener sentimientos románticos hacia Harry Potter, mi único (y secreto) amigo real, me aterró la idea de estar enamorado de un mestizo, ya que siendo Draco Malfoy, hijo de Lucius y Narcissa Malfoy no merecía menos que alguien de sangre pura, pero mi corazón había decidido, debía tomar cartas en el asunto y tentar el terreno antes de cualquier cosa.

Esto no debía de pasar, él debe derrotar al señor oscuro, y mi familia lo sirve, ya sabíamos que nuestra relación podría ocasionar muchos riesgos, pero ya nos conocíamos y teníamos un lazo especial, tan fuerte y limpio que estamos dispuestos a correr cualquier peligro.

Potter, Potter... ¿Qué hechizo o pócima me diste para estar a tus pies?

Notas del autor:
Gracias por leer, estaré actualizando cada semana, espero les guste.