No ordinary love

Entrenamiento.

"Deseas pasión, aventura y un poco de peligro"

POV Damon.

Bella tomó mi mano dudosa y yo la sostuve, coloqué su brazo alrededor del mío. Siendo otras circunstancias parecíamos la pareja del año.

Sonreí de pensarlo.

Ambos caminamos por los pasillos de la mansión y elegí una habitación cercana a la mía, quizás sea demasiado protector pero era lo más conveniente sí ella necesitaba de mí.

Me miró divertida.

-¿Es enserio? ¿Acabas de elegir la habitación más cercana a la tuya?-Bella dijo entre risas.

-Yup-Dije serio.

Ella negó con la cabeza.

Abrí la puerta de la habitación y moví mi cabeza en señal de que entrará.
Ella se movió incómoda y entró dudosa, caminó a paso lento dentro de la misma, sus ojos estaban abiertos como platos, como sí nunca hubiese visto algo igual

-Ho no, esto es demasiado-Bella dijo tímidamente.

-Es solo una habitación Bella, no es nada fuera de lo ordinario-Dije secamente.

-Para alguien acostumbrado a los lujos, en cambio la habitación de Caroline me parecía bastante amplia, está es como una casa para mí sola-Bella dijo sarcástica.

Sonreí.

-Es tuya ahora-Dije cruzandome de brazos.

Ella comenzó a mirar la habitación, era bastante similar a la mía, un enorme ropero, una cama lo bastante amplia (ya saben se puede ofrecer una noche de buen sexo), el pensar eso me vino un nudo en el estómago, pensar a Bella en una situación tan íntima con alguien me molestaba un poco.

Bella sonrió nerviosa y colocó un mechón de cabello detrás de su oído.

-Gracias Damon, por todo esto, es demasiado-Bella dijo sentándose en la orilla de la cama .

Caminé hacia ella y me senté a su lado.

-Eso hacen los amigos-Dije con una media sonrisa.

Bella me miró divertida.

Dudosa acercó su mano a la mía y la tomó.

-Gracias por ser mi amigo Damon-Bella dijo con sinceridad.

Y yo solo le mandé un guiño.

Me puse de pie.

-Debes estar agotada minina, duerme un poco-Dije acercándome a la puerta.

Bella tomó una almohada que me lanzó y logré esquivar.
Ella parecía divertida, no podía negarlo parecía una niña de 8 años.

-No olvides que prometiste enseñarme a pelear Salvatore-Bella sonrió.

-¿Me acabas de lanzar una almohada?-Pregunté entre risas.

-Bueno no iba a amenazarte, decidí atacar al enemigo-Bella reía.

-No por la espalda, tramposa-Dije tomando la almohada y lanzandola con la menor fuerza posible.

Ella rodó en la cama y la logró esquivar.

-¿Mis reflejos de humana son buenos eh?-Dijo tomando la almohada nuevamente lanzadomela.

Rodeé los ojos y la tomé con una mano antes de llegar hacia mí.
La miré con incrédulidad.