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Estaban comiendo en el salón mientras miraban la tele en completo silencio, Rubén no se sentía con fuerzas para iniciar una conversación que acabaría mal, la tele se apagó y Rubén miro a Samuel el cual parecía muy serio

Rubén-Eeee ¿por qué apagas.....

Samuel-¿Por que lo hiciste?-Rubén lado un poco la cabeza-los brazos

Rubén-no se...tu...tu lo dijiste-las lágrimas exigían salir haciendo arder sus ojos y tubo que dejar las- Vas a buscar a alguien mejor....-Tomo aire- me dejaras por alguien que si te complazca ¿de qué te sirvo? Yo cambié por ti y resulta que ahora tu....¿Que es lo que te pasa? ¿por qué me tratas como un puto objeto sexual, como un saco de boxeo

Samuel se levantó de golpe acercándose peligrosamente, Rubén se hecho hacía atrás rápidamente intento levantarse pero los brazos de Samuel se lo impidieron se sentó encima suya con las piernas sacada lado, y lo beso era un beso caliente, los brazos de Samuel rodearon su cuello acercando lo con fuerza, pegando sus cuerpos

Rubén abrió los ojos a tope y pudo ver los de Samuel cerrados pudo jurar ver lágrimas, pero el cerro los suyos y sus manos viajaron hacia su culo para que el más bajo no se escurriera, Samuel suspiro ante ese contacto,  aún que no lo admitiera le encantaba que lo tocará, aún que le dijera que no lo tocara, deseaba que lo hiciera

Samuel-jodeme-susurro contra sus labios, a pesar de el dolor en sus muñecas lo levantó y los echo a ambos al sofá, llevaban sin tocarse más de un mes por decisión de Rubén

Se miraron unos segundos en ambos ojos se notaba un brillo lujurioso, se desean como nunca antes, se acariciaban sacándose suspiros, se besan queriendo robarse el oxígeno, incluso mordiendo se, ¿desnudarse? Se arrancaban la ropa, Samuel se derrite con esas caricias, a Rubén cada pelo de el cuerpo se le pone de punta

Samuel-Destrózame...-El de ojos verdes se acerco a su cuello y aspiro ese aroma que le encantaba del más bajo


Los besos que Rubén daba por todo su cuerpo hacían que el verdadero Samuel saliera, veo a como el oji-morado cerraba sus ojos al adentrarse en el, mordía su labio para evitar pronunciar su nombre, sus bocas  se unen por instinto, ante las mariposas que nacen en ambos estómagos, entra en el con fuerza tomando su todo haciendo lo gritar su nombre, la lujuria y el placer habían sido desatado

Chantaje [Rubegetta]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora