Señor Equivocado

Capítulo 8

-Yan a donde vamos?-dije

-Nos iremos a divertir un poco. -dijo mientras me subía a la moto

-Me parece bien, después de todo lo que pasamos ahí adentro. -dije riendo

-Es cierto y peor aún con mi tía pfff, es una bruja esa mujer.-dijo

*Yan me llevo a recorrer todo el pueblo, visité varios lugares, nos tomamos algunas fotos.. *

-Yan, tengo hambre. -dije

-Hambre? Si acabamos de almorzar en mi casa, Dios. -dijo

-Tengo antojo de un helado, que quieres que haga. -dije mientras hacía puchero

-Esta bien, vamos por ese maldito helado, antes que me comas a mi...-dijo

******

-Señor disculpe, que sabores tiene?-dijo Yan

-Solo me queda de chocolate, fresa, y coco. -dijo el señor

-Yo quiero que coco. -dije mientras alzaba la mano

-Deme uno de coco y otro de fresa.-dijo

-Toma, ahora si feliz?-dijo Yan

-Claro que sí! -dije sonriendo

*****

-No pensé que te gustará el sabor a fresa? -dije

-Por qué? Acaso pensabas que sólo el helado de fresa comen las chicas?-dijo

-No.. Pero pensé que te gustaban otro tipo de sabores, como el chocolate no sé. -dije mientras le daba un mordisco a mi helado

-Toma prueba. -dijo Yan mientras me tiro el helado en mi nariz

-Oye que haces eres un idiota, vas a ver. -dije riendo

-Oye no, que asco, Eli basta ya. -dijo Yan

-Ya estamos a mano, helado por helado cariño. -dije riéndome

-Tienes un poco de helado... -dijo

-Dónde?-dije

-Espera. -dijo mientras me limpiaba el helado de la boca con sus dedos

-Ehmm... Gracias. -dije

-Quieres ir a navegar?-dijo

-Tienes un bote?-dije asombrada

-Algo así, en realidad es un yate y estamos cerca al puerto, así que vamos. -dijo

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-Adelante vecina. -dijo Yan mientras me sostenía de la mano para subir al yate

-Gracias ser odioso. -dije riendo

-Te gusta?-dijo

-Claro que sí, es hermoso, solo mira la vista, me gustaría quedarme acá por siempre.-dije mientras me sentaba a observar el mar

-Quieres navegar?-dijo

-Quién yo?-dije

-Eli, hay alguien más en el yate?-dijo

-No sé hacerlo Yan. -dije

-Ven vamos, yo te enseño. -dijo

-Solo lo sostengo y ya?-dije mientras tomaba el timón

-No espera, lo estás haciendo mal.-dijo mientras se puso atrás mío y me sujetaba las manos indicándome como tenía que hacerlo.

*Nos quedamos así por un buen rato, era un buen maestro después de todo, estaba tan relajada, cuando volteé a verlo, él ya me estaba mirando, inocentemente sin darse cuenta me había lanzado una sonrisa y yo también hice lo mismo *