Masturbación.
Narradora.
Joaquín Bondoni, un joven de catorce años, soltero, virgen, hijo consentido de papi, casi todo el colegio muere por solo un suave tacto de su delicada piel.Se encuentra en estos momentos comprando algo de ropa que claramente no le hacía falta, pero por su aburrimiento, decidió comprar hasta llenar diez bolsas de las prendas mas caras del lugar.
Al salir de allí, Mauricio, su chofer lo llevó a casa.
[...]
Bufando subió las escaleras con el chofer tras el cargando puras bolsas de color marrón.
-Estoy tan cansado de no recibir ningún tipo de atención -se quejó en voz alta.
-Señor Bondoni, ¿que es lo que le falta? -preguntó Mauricio- ¡Lo tiene literalmente todo! -exclamó.
-¿Donde queda el cariño de mi padre? ¿ah? Desde que mamá murió siempre he quedado solo, no me basta con el dinero que recibo a diario, yo...-suspiró- necesito compañía.
-Yo puedo ser su amig...-sus palabras fueron interrumpidas por el sonido de su celular- aguarde un segundo -contestó.
Nadie tiene tiempo para mi - pensó el joven Bondoni al entrar a su habitación y poniendo seguro a la puerta.
[...]
El señor Uberto había llegado a casa, no venía solo...cierto rizado de cuerpo ejercitado llegó con el.
Joaquín escuchó leves risas provenientes de abajo, bajó con destino a la sala.
-¿Papi?
-Joaquín, hijo -se acercó, le dio un beso en la frente y se separó de el- te presento a Emilio, será tu nuevo niñero.
Los dos se quedaron mirándose o mas bien comiéndose con la mirada, sonrieron.
Narra Joaquín.
Pero papá -me queje- yo me puedo cuidar solo.-Jovencito, Emilio se hará cargo de ti, te guste o no -maldita sea.
Debo decir que el chico no se veía nada mal, ¿pero que estás diciendo Joaquín?
Está bien papá -se acercó de nuevo a mi dándome un beso sonoro en la mejilla.
-Gracias por entenderlo hijo -acarició mi mejilla- ahora debo volver al trabajo, Mauricio me llevará, trata bien a Emilio -sonrió saliendo de la casa.
-¿Que te gustaría hacer Joaquín? -habló el molesto sujeto.
Me gustaría echarte a patadas de mi casa -sonreí.
-Quiero tratar de que nos llevemos bien -reí.
¿Tu y yo? -me crucé de brazos- nunca jamás en la vida ¿entendiste?
Dicho eso subí a mi habitación dejando a Emilio con la palabra en la boca.
[...]
Pasaron varias horas de no salir de mi cuarto, tenía demasiada hambre, ¿Y si bajo a la cocina? -pensé.
Con mucho cuidado, abrí la puerta de mi habitación, bajé con cuidado las escaleras sin hacer mucho ruido.
Preparé un sándwich de mermelada y mantequilla de maní, subí de nuevo sin importarme nada, estaba a punto de entrar a mi habitación, oí un pequeño ruido proveniente del cuarto de al lado (el de visitas)
Me acerqué un poco mas para lograr oir bien de que se trataba.
Llevé una mano a mi boca cubriendo esta, eran gemidos acompañados de suspiros y jadeos, miré por la perilla de la puerta.
¡Oh Dios!
¡Mi niñero se estaba masturbando en mi propia casa!
No me perdí ningún detalle de lo que hacía, en lo personal jamás en mi vida lo había hecho por respeto a los que viven aquí.
Miré mi pantalón por el cual se notaba un gran bulto, mordí mi labio inferior, dolía como el mismísimo infierno, no, no lo haría...
Aumentó los sonidos de sus gemidos, entré a la habitación sin que se de cuenta, divisé su abdomen bien trabajado y su miembro bien...apetitoso...
¿Emi? -al escucharme, se sobresaltó sin quitar la mano de su pene.
-Joaquín, ¿c-como entraste?
Pues por la puerta menso, pero dime...¿eso te causa algo? -señalé su entrepierna, me sonrió.
-¿Nunca lo has hecho? -negué- ven aquí, te voy a enseñar como lo debes de hacer, ¿bien?
Está bien...¿pero no es nada malo, cierto?
-Te aseguro que no niño, y por lo que veo tienes un pequeño problema allí abajo -me sonrojé intentando tapar mi erección.
Me senté a un lado de él.
-Debes estar en la misma posición que yo...-susurró.
Quedé acostado, mirando hacia el techo.
-Ahora debes calentarte...-se subió arriba mio, comenzó a repartir besos húmedos por mi cuello y abdomen, jadeé- te aseguro que te sentirás muy bien...-susurró.
Posó su mano en mi entrepierna sin dejar de besar mi cuello.
Ah...
-¿Te gusta? -asentí, se volvió a acostar al igual que yo, lo miré extrañado-tranquilo, ahora quítate la ropa...-lo hice dejando mi miembro libre, gemí.
-Estás excelente pequeño...-acarició mi cintura, jadeé- agarra tu pene y mueve tu mano de arriba a abajo, ¿entendido? -asentí.
Comencé a mover mi mano por toda mi extensión, el hacía lo mismo.
Ah...se s-siente rico...-aceleré mis movimientos- ah..Emilio..mm...
-Joaquín mgh ah...-aceleró sus movimientos, aumenté el ritmo, no aguantaba mas, me subí arriba suyo, posé ambas manos en su pecho-¿Q-que haces? ah...
Comencé a frotar nuestros miembros creando una deliciosa fricción entre ambos, posó sus manos en mi cintura, aumenté el vaivén de un lado a otro.
Eché mi cabeza para atrás sintiendo como bajaba sus manos a mis glúteos, los apretó.
Emi ah...-cada vez me movía mas rápido, sentí un cosquilleo en mi vientre, no sabía que significaba...pero se sentía delicioso...
-M-me voy a correr pequeño...-empecé a saltar simulando estocadas, el cosquilleo se hizo mas intenso, un líquido transparente salió de mi pene con mucha rapidez, sentí algo húmedo en mi abdomen, Emilio también había hecho lo mismo.
Aún jadeando me recosté en la cama, nos miramos.
-¿Que tal estuvo?
Excelentemente bien...gracias -suspiré.
-Para eso estamos los niñeros -me guiñó un ojo, reímos.
Ahora quiero volver a hacerlo...-hablé.
-Las veces que quieras, solo no lo hagas si yo no estoy contigo, ¿bien?
Pero...¿porque?
-Es malo hacerlo sin que alguien te esté observando, ese alguien voy a ser yo.
Está bien Emi -besé su mejilla- ahora me voy a comer porque tengo mucha hambre.
-Vamos.
Fin...
WOLAAAA GENTEEE, ¡ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO!
Perdón por los errores de dedo.
Bueno no se olviden de votar, comentar, compartir y de seguirme.
En fin...
L@s amo💜💜💜
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12 days of smut [Emiliaco +18]✔
Ficción General[Terminada] Doce Días cargados de sexo, pasión y muchos orgasmos... (+18)