─ Memory. [mlb one shot]

♡. ─ Capítulo Único;

"Un aura triste" era la perfecta definición de su alrededor según ella, y aún sin entender perfectamente por qué, así era. Luego de regresar del colegio y decidir que almorzar con sus padres no era una opción debido a que no quería preocuparlos con su terrible estado de ánimo, subió a su habitación sin más, tratando de despejar su cabeza, o más bien, llenarla, ya que no había casi nada en ella.

Se encontraba sentada en una esquina de su habitación con un par de portafolios encima los cuales estaban llenos con fotos en donde aparecía ella junto a quienes suponía eran sus compañeros del colegio, los reconocía por sus nombres gracias a que había compartido con ellos en clase los últimos días, pero no más. Siguió rebuscando en ese gran baúl rosa tratando de ver qué más hallaba ahí con tal de llenar las lagunas mentales que tenía, pero terminó topándose con una cantidad excesiva de regalos según su parecer, también habían dibujos, cartas, bosquejos de diseños y una cajita en forma de medialuna de color rosa que contaba con pequeños lunares blancos y detalles en negro que combinaban perfectamente con el resto de las cosas que se encontraban en su habitación; algo extraña, pero linda a su gusto y mientras la inspeccionaba para saber de qué se trataba logró detallar una entrada, al parecer, de una llave.

─ ¿Una llave? ─ se decía a si misma ─ ¿Para qué la necesitaría?, Así de importante será para que necesite una...¡Llave! ─ exclamó ─ ¡CLARO! Creo haber visto una en... ─ se levantó desesperadamente del suelo para buscar en sus cajones dando finalmente con lo que buscaba ─ Por favor, espero que sea esta. ─ tomó ambos objetos en manos y se sentó en el sillón que tenía en la parte baja de su habitación.

Empezó a tronar, el cielo anunciando que en poco tiempo llovería, pero Marinette sólo se mantenía fija en la cajita que le había llamado la atención desde que la vió, la cuál al momento de introducir la llave se abrió de golpe dejando su interior expuesto en dónde a simple vista se veían dos cosas: uno era un collar, dicho collar tenía como dige lo que parecía la mitad del símbolo del Yin y el Yang en color rojo, «¿Y esto?» pensó, le parecía un detalle extraño pero que de igual manera terminó colocándose pues ha de admitir que le parecía un objeto muy curioso, también halló un pequeño amuleto en colores azules y amarillos con una particular combinación de piezas, retirándo ambos objetos dió con que debajo de estos había algo más; un diario, su diario.

Llevaba al menos una hora leyendo lo que identificó como su diario sorprendiéndose con las cosas que se encontraban allí escritas; desde anécdotas graciosas, bonitos recortes, secretos íntimos y poemas quizás nunca dichos, pero entre líneas y pasadas de páginas había algo que no daba cabida en su cabeza y eso llevaba los nombres de Ladybug y Chat Noir.

Supuso que se trataban de los superhéroes que había escuchado una vez de la boca de uno de sus amigos, esos mismos que tenían una estatua en su honor en la entrada del parque que se encontraba frente a su casa, pero ¿Por qué escribía sobre ellos? ¿Alguna vez los conoció en persona? ¿Era ella su mayor fan? ¿Sabía quiénes eran? Y como si el destino se hubiera puesto en complot para responderle, nuevamente se oyó un trueno en el cielo causándole un fuerte dolor de cabeza que la obligó a tomarse ambos lados de la misma, cómo si hubiera recibido un gran golpe en ella.

                               ─ ♡ ─

Bajaba las escaleras a zancadas sintiendo que si iba más rápido no mediría sus pisadas al punto de caerse, pero por suerte no fue así.

─ Cariño, ¿Estás bien?  ─ oyó la voz de su madre que provenía desde la cocina haciéndola parar en seco.

─ S-Sí mamá, no te preocupes es solo que... ─ le dió un recorrido a la habitación con la mirada ─ ¡Necesito salir a entregar algo! ─ explicó lo más rápido que pudo.