Ojos puros y embriagantes

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Shisui observo los ojos perlas de la joven, no había observado antes un color similar ¿era ciega? los rumores eran poco fiables, él creía que sí, no le parecía posible que una humana resultara increíblemente singular. Continuo observando, tenia un cabello azul como el cielo nocturno muy liso y largo hasta las caderas, sus rasgos era finos, nariz pequeña, cejas delgadas, pestañas rizadas y labios carnosos al igual que pequeños. 

Durante un momento la puerta de la habitación estuvo abierta y ambos solo podían mirarse, él intrigado y ella incapaz de saber como proceder ante la mirada neutra del hombre. Shisui bajo la mirada y tuvo suerte de que ese gesto resultara desapercibido por la fémina. Tenia una bata de baño lila, sus pies eran pequeños y estaban descalzos sobre la alfombra de terciopelo morado oscuro. Intento ver un poco mas allá pero semejante atuendo ocultaba muy bien su anatomía. 

La mujer carraspeo incomoda y Shisui decidió nuevamente observarla a los ojos- Bienvenido Uchiha-san, es un placer recibirlo- ella hizo una pronunciada reverencia y al levantarse clavo sus ojos en la puerta, tímidamente lo miro y sus mejillas adquirieron un color carmesí que al hombre le pareció encantador- ¿Podría?...- no pronuncio mas palabras y sutilmente hizo una seña hacia la puerta.

-Sí- Shisui cerro rápidamente la puerta y estaba sorprendido, era como si sus palabras estuvieran atoradas en su garganta, él no era así. Escasamente frustrado decidió actuar-¿Cómo te llamas?-  aunque ya lo sabia quería escucharla decir su nombre, ambos continuaban manteniendo la distancia inicial. 

-Hinata Hyuga- Respondió ella, sus gestos demostraban sorpresa y él no sabia el motivo-¿Le gustaría una bebida?- Le ofreció cambiando el tema, era como si solo quisiera ir a la acción. En un inicio lo había observado directamente pero ahora evadía su mirada y actuaba bastante tímida para una prostituta experimentada y de alto rango.   

-Sí- Ella al escuchar su respuesta camino hacia la barra y Shisui inspecciono la habitación. Era acogedora y elegante, al Uchiha no le importaba pagar exuberantes cantidades de dinero si con eso obtenía un buen sexo, cada prostituta de alto rango de Sasuke lo conocía, algunas eran vendidas a otros proxenetas y otras decidían retirarse debido a la vejez, el punto era que Shisui había estado en esas habitaciones innumerables veces. 

Tenían una ventana enorme en donde podías observar los maravillosos y exuberantes jardines del burdel, cada una de las flores fueron plantas por la matriarca del clan Uchiha. También disponían de un bar y una pequeña cocina y sala. El lugar era de lujo debido a las grandes cantidades de dinero que se tuvo que pagar para pasar una noche con las atractivas damas de compañía. 

Shisui pudo observar como ella delicadamente sostuvo una copa del bar para luego dirigirse a él, extrañamente evitaba su mirada, al ser ciega era lógico que pudiera mirar a donde quisiese, el resultado siempre seria el mismo, por ello esa actitud le resulto extraña- ¿Qué le sirvo Uchiha-san?- Pregunto expectante. 

-Puedes llamarme Shisui, le dicen "Uchiha-san" a mi tío- Pidió acercándose a ella, en otras circunstancias le habría abrazado la espalda y besado el cuello, sin embargo, un hombre no tenia que ser muy listo para entender que ella no estaba cómoda con nada de eso y por primera vez en mucho tiempo decidió tener un poco de tacto y no presionarla. 

-Esta bien S-Shisui-san-Él se sorprendió ante el tartamudeo y ella pareció reprenderse mentalmente. Una floja y discreta sonrisa afloro en Shisui, ese simple gesto le pareció adorable, la dama de ojos perlas era un libro abierto para sus audaces ojos.

-¿Tienen aquí Heidsieck?- Pregunto con la intención de continuar la conversación. Shisui sabia los tipos de tragos que habían en esas habitaciones de lujo. El infierno tenia mucha influencia humana y las bebidas alcohólicas no se quedaban atrás, ese en especial era uno de sus vinos favoritos, aunque si era sincero consigo mismo no tenia ganas de beber y eso le pareció sumamente extraño, hasta ahora no actuó seductor, imprudente o hablador, parecía mas a Itachi en su día a día, calmado y callado.

Escapando del infiernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora