EL RITMO DEL CORAZÓN

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PIP,PIP,PIP. Se escuchaba el sonido de la maquina en toda la sala del hospital, una chica de 18 años-Alexa- lucha por su vida postrada en una cama, nadie entiende que es lo que le sucede, sus padres no están con ella, solo su hermano mellizo Axel, los doctores no encuentran nada malo en ella, solo saben que su corazón esta muriendo, su corazón cada vez estaba mas débil y sus latidos mas pausados.
-Doctor-pronuncia Axel en un tono afligido- ¿mi hermana se salvara? 
-Joven-dice revisando unos papeles-joven Cruz, su hermana esta en una situación delicada, no sabemos lo que tiene pero debe ser consciente que estamos haciendo todo lo que tenemos en nuestras manos, ¿okay?- el chico asintió sin mucho animo y volvió a lado de su hermana.

Pasaron horas, días, semanas, meses y ella no mejoraba, pero tampoco empeoraba, lo peor...es que no despertaba, no podían saber si el tratamiento funcionaba o no si ellas no despertaba. Axel entro a la habitación como hace todos los días, solo que esta vez noto algo distinto, sobre la mesita de noche había una caja y una pulsera, extrañado abrió la caja y se encontró unos chocolates, también una nota que decía: "cómeme", el lo dudo un momento pero tomo uno de los chocolates, al hacerlo sintió como todo cambiaba miro la pulsera y había una nota que decida:"úsame", el se iba colocar la pulsera pero de pronto...
un sonido agudo se escucho en la habitación, voltio a ver su hermana pero ya era tarde, ese dia Alexa tuvo un paro cardíaco pero no murió.

El estuvo culpándose ya que pensaba que fue su culpa por falta de atención, esa noche el no durmió, estuvo pensando en su hermana hasta el dia siguiente, sus padres parecían no importarles la salud de su hija, hacían caso omiso de ella aunque la verdad a el ya no le extrañaba. Esa casa era como una prisión y ellos dos eran los prisioneros el dia que su hermana se desmayo ellos ni mostraron interés en llamar una ambulancia, el tuvo que encargarse de todo, acompañar a su hermana y estar con ella en todos las revisiones y procedimientos.

Habia pasado una semana desde el paro cardíaco de Alexa, los doctores habían perdido la fe en ella, pero Axel no se iba a rendir, pidió una noche mas, si esta noche ella no daba señales le dejarían de proveer sedantes y dejarían que su corazón luchara por su cuenta,el volvió a ver la misma caja  y la misma pulsera solo que ahora la caja era de un color distinto, volvió a abrir la caja esperando los mismos chocolates pero se sorprendió al encontrarse con otra pulsera con una nota que decía: "pulseras de la esperanza", le pareció algo raro pero se coloco una a el y la otra a Alexa y se sentó a lado de la camilla  -vamos Alexa-dijo el -yo se que puedes-dice el tomando su mano, de pronto siente un pequeño apretón y se sobresalta llamando a un doctor, los doctores ingresaron inmediatamente, ése dia, ése dia Alexa despertó, ella y su hermano volvieron a casa hicieron sus maletas y se fueron a vivir a una casa que compraron a las afueras de la ciudad, los doctores nunca comprendieron que fue lo que sucedió, que fue lo que paso con el corazón de esa chica, desde ese momento Alexa y Axel jamas se quitaron las pulseras, teniéndolas como recuerdo que jamas deben de perder la esperanza.

Dicen que cada vez que alguien esta en una situación difícil y esta a apunto de rendirse una misteriosa cajita aparece con chocolates y una pulsera en ella, cambiando completamente sus vidas, recordando les que no pierdan la esperanza

El Enredo de mis RizosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora