(se cierra el arco de la pijama por falta de inspiración)
Varios mensajes sonaron en su teléfono, algunos del judío con picor de culo, otros de Craig enviando memes por el grupo y por último, de Wendy, anunciando que habían cancelado la pijamada y pospuesto esta para otro día, con motivo de que a la mayoría no las habían dejado por la próxima tormenta de nieve.
— ufff.. se nos jodió el experimento chicos, hay tormenta mañana y las chicas cancelaron todo — avisó el _____, causando varias quejas en sus compañeros, quienes empezaron a desmontar todo para pasarlo al sótano.
— ¡Carajo, puto clima de mierda! — ya se escuchaba las quejas del gordo, quien chillaba como puerco mientras juntaba sus cosas.
Butters salió volando para su casa antes de ser castigado por estar fuera con alerta de tormenta, Tweek acompañaba a Craig hasta su casa, Token se robaba a Clyde para ir a comprar provisiones de comida en caso de emergencias por videollamada, Kyle peleaba con Cartman por alguna razón, y Stan ya estaba yéndose a su casa.
Kenny se acercó a él. — ey __________, me preguntaba si podría quedarme en tu casa esta noche —. Habló entre su capucha, confundiendo al _____ que intentaba armar el extraño lenguaje del rubio.
— Claro, dejá le pregunto a mis viejos —.
Sonidos de llamada de Android. . .
"Cantá"
"¿Se puede quedar un amigo en casa?"
"Va a haber tormenta, debería quedarse en su casa"
"Él me pidió, supongo que será por algo"
". . . Bien, pero vos lavás los platos de la semana"
"Nooooo, dolor, traición" ruidos de agonía (?)
"Deja de pavear y vení a casa"
"Voy yendo"
Fin de la llamada.
— mueve el culo que queda lejos mi casa —. Habla el Argentino, despidiéndose con la mano de sus compañeros y de la madre del gordito.
El rubio celebra en silencio, siguiendo a su amigo por las calles del pueblo.
— ¿Por qué me pides quedarte en mi casa? —. Preguntó por curiosidad mientras caminaba junto al naranjoso, quien pensó un momento su respuesta.
— mi casa es fría, la tuya no, ni tampoco hay que comer waffles congelados —. Rió, haciendo referencia a su pobreza, el _____ le comprendió enseguida, ambos comenzando a charlar sobre sus vidas miserables, o al menos en la argentino, antes del nuevo trabajo de sus padres, los ascensos y traspasos.
Entre charla y charla, compraron papas fritas, alquilaron una película de terror, y llegaron a casa del latino, quien tocó la puerta esperando que su familia le abriera.
— . . . ¡Papá! ¡Hay dos mugrientos con olor a pata en la puerta! —. Su hermana les recibió, y el rubio solo entendió la palabra pata en toda la oración.
— ¡Calláte, Barbie de la saladita, olor a pata tenés vos qué no te bañas nunca, mugrienta! — seguían discutiendo en su idioma, mientras los mayores del hogar recibían y hacían pasar al rubio, quien enseguida fue llevado frente a la estufa a leña de la casa.
Terminando de tirarse hasta al gato, el ____ se volvió con su amigo, sonriendole amable mientras le estiraba una taza de chocolatada caliente, sentandose al lado para apreciar el fuego.
— me gusta tu casa —. Los murmullos del rubio comenzaban a ser el pan de cada día, podría acostumbrarse a ellos. — es calentita y tu familia se ve agradable —.
— espera a entender lo que dicen, ahí dejarán de ser agradables —. Se carcajeó mientras daba un sorbo a su bebida, cruzando sus piernas como indio. — che, Kenny —.
Un sonido mudo le dió pié a continuar hablando. — ¿Tenés hermanos? —. Preguntó mientras le veía, mientras con su mano libre escribía sin necesidad de ver el teléfono, la habilidad de 1. Ser un adicto al celular. Y 2. Ser un pajero.
— ¡Tengo dos hermanos! Mi hermano mayor se llama Kevin, es un imbécil a veces, y mi hermanita menor se llama Karen, seguro le agradarías —. Pudo distinguir una sonrisa en su rostro, sus ojos, entre violeta y azul, se achinaban junto al movimiento de su capucha.
— obviamente le voy a agradar, ¿Cómo no? Si soy un bombón —. Sus cabellos fueron echados hacia atrás, mientras la arrogancia de sus palabras se esfumaba escuchando la débil risa del rubio, quien solo le daba la espalda para poder tomar del líquido de los dioses.
— ¡No te burles! Ya te voy a hacer caer rendido a mis pies, forro —.
— suerte con eso, homosexual —. Aún seguía con risitas gangosas.
— ¡Eso no es un insulto, Kenny! —.
— ¡Nunca dije que lo fuera! —.
— ¡Pues parecía que si lo dijiste como insulto! —.
Y comenzaron a pelear.
ESTÁS LEYENDO
--Babysitter-- (Kenny+ButtersxMale!Reader) CANCELADA
DiversosHISTORIA DESCONTINUADA Este programa es irreal y grosero, las voces célebres son pobres imitaciones, y debido a su contenido, nadie lo debe ver A veces conseguir dinero es más fácil de lo que imaginas Creditos a Matt Stone y a Trey Parker, y a todos...