Al siguiente día, iba camino a casa de Camila, no había dormido nada realizando los planos y era domingo, pero quería ese trabajo, no sabía si más por la necesidad de dinero o por estar cerca de ella.
Llegué a su casa y esta vez me dejaron pasar con mi auto y estacionarlo cerca de la entrada, me dejaron pasar y encontré a Camila sentada en su sala y mirando a la piscina, tenía sus ojos llorosos.
-Camila? - pregunté y ella me miró pasando su mano por los ojos en un intento de quitar las lágrimas
-Hola - dijo mirando el sillón - siéntate por favor - me senté casi junto a ella - perdón que me veas así
-Qué tienes? Claro si es que puedo preguntar
-Claro, igual te enterarás, Maddie Stevens...
-Una actriz no es así?
-Si, también mi amiga... bueno ella falleció en la madrugada... Parece haber sido una sobredosis
-Lo siento mucho Camila...
-Gracias - medio me sonrió - era una gran persona, una gran amiga, me hará falta. Ahora muéstrame lo que traes
-Si quieres podemos dejarlo para otro día
-No, sé que te hice trabajar toda la noche así que muéstrame - saqué mi laptop y primero le mostré los planos, seguido de unos gráficos que había logrado terminar a última hora
-Me gusta - medio sonrió de nuevo - tienes el trabajo
-En serio?
-Si, porque de verdad me gustó, no porque necesites el trabajo - ella se puso de pie y extendió su mano hacia mi, yo hice lo mismo y dimos un ligero apretón
-Muchas gracias, prometo hacerlo bien
-Yo lo sé - dijo mientras otra lágrima comenzaba a rodar por su mejilla - Bueno, puedes empezar mañana en la tarde después de tu horario en el set
-Camila, no te puedo dejar así cómo estás - ella iba a decir algo pero yo la abracé, ella instantáneamente comenzó a llorar y yo tan sólo seguí abrazándola
-La extrañaré mucho - dijo sollozando - la dejé llorar un rato más en mis brazos cuando su teléfono sonó, ella se separó con un poco de trabajo y aclaró la garganta antes de responder
-Bueno?... hola amor, si yo... - me miró unos segundos y salió a su jardín donde comenzó a llorar de nuevo, no sabía si era hora de irme
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Tenía que salir al jardín para alejarme de lauren, ese abrazo se me había hecho tan familiar que me dio miedo
-Me enteré de lo de Maddie... yo estaba en un programa por eso no me enteré antes... Estoy esperando que me digan a qué hora puede salir el avión hacia allá
-Qué? No, no lo hagas ronnie, tienes una agenda bastante apretada
-Acaba de fallecer la mejor amiga de mi novia, tengo que estar contigo
-El funeral será en unas horas, ronnie, no vale la pena que viajes... Maddie... ella ya no está - dije comenzando a llorar de nuevo
-No sabes cómo me mata no estar ahí... Y te aseguro que vale la pena que viaje, estaré ahí en unas horas, te amo - la llamada terminó y pude ver que lauren me miraba desde la ventana de la sala. Limpié mis lágrimas de nuevo y entré.
-Creo que no podrás iniciar mañana , esto tiene que ser sorpresa para Ronnie
-Oh... pensé que estaba de viaje
-Si, pero volverá hoy yo creo que el martes podrás venir... No hubiera querido que me vieras así...
-¿Qué? no, no importa haberte visto así... Es decir... te he visto en todos tus estados - Medio sonreí y la miré
-Bueno, en eso tienes razón - De pronto me sentí un poco mareada, desde la madrugada que recibí la llamada, no había ni siquiera tomado un vaso de agua
-Camila - dijo Lauren yendo hacia a mí cuando sentí cómo estaba más mareada.
Lo siguiente que supe fue que abrí los ojos estando en mi habitación, Lauren estaba ahí con un pedazo de algodón en las manos mientras me miraba
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Cuando vi que Camila estaba extraña, fui hacia ella y alcancé a tomarla en mis brazos, la acosté en el sillón y comencé a moverla y a llamarla pero no respondía, supuse que en su recámara tendría algún botiquín, así que decidí tomarla en mis brazos y subir las escaleras con ella, la dejé en su cama y fui a su baño, a pesar de que era hermoso, no me dio mucho tiempo de verlo ya que encontré su botiquín y saqué un alcohol y una caja con algodón, salí de nuevo a la habitación y puse alcohol en el algodón para pasarlo con su nariz hasta que comenzó a abrir los ojos.
-Me asustaste - le dije y ella me miró un poco desorientada.
-Por qué te fuiste? - preguntó mirándome
-Aquí he estado, te subí a tu habitación...
-No me refiero a ahora... - dijo ya viéndose mucho mejor, yo la miré sin saber qué decir - me dolió mucho... tal vez no el que te fueras a Europa, pero sí el que te fueras de mi vida, para el momento en que te fuiste a Europa tú ya te habías ido de mi vida... yo te esperé sabes? en nuestro lugar, después de que te envié esa carta, te esperé horas, te esperé hasta que comenzó a llover, hasta que terminé completamente empapada, te esperé a pesar de eso, te esperé mientras temblaba del frío porque mi cabello escurría... Y no perdí la esperanza de que llegaras, hasta que mi hermano llegó por mí, con una toalla, una cobija también. Ahí supe que te habías ido de mi, que te habías marchado sin decir adiós, te habías marchado aún estando a unas casas de la mía, te habías marchado a pesar de que yo te amé con todo lo que tenía y con todo lo que tenía por ofrecer. Y de hecho también te fuiste con eso, te fuiste con mi sonrisa que no supo como volver hasta tiempo después, te fuiste con la ilusión que yo tenía de algún día poder tomar tu mano frente a la gente. Y lo peor de todo esto es que a pesar de que hiciste todo eso, en cuánto te vi de nuevo y vi tus ojos, sentí tantas cosas que tuve que huir de ti.
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❤️
