Mi teléfono me despertó, respondí tan rápido como pude
-Bueno?
-Lauren
-Camila - dije intentando despertar un poco más , habían pasado unos cinco días desde que Camila se había ido a Europa, el trabajo en su casa estaba casi hecho y yo había encontrado un departamento al cual mudarme
-Debes de enterarte antes de que lo sepas por la televisión u otras personas
-Qué pasa? Me estás asustando
-No es nada por lo que asustarse pero... Ronnie y yo nos casamos
-Qué?
-Si... ella y yo, decidimos casarnos antes, nuestras familias vinieron hasta aquí, pudimos reservar uno de esos castillos donde todo es mágico y nos casamos
-No me lo esperaba... pero... me alegro por ti. Me alegro que hayas encontrado a quien te hace feliz
-Sé que tú encontrarás a alguien también, ahora eres libre
-Se siente bien serlo
-Tengo que irme, sólo quería que lo supieras por mi
-Gracias por avisarme
-Bueno, me tengo que ir
-Espera Camila
-Si?
-Felicidades, ronnie es afortunada de tenerte
-A veces siento que yo soy la afortunada... Nos vemos pronto lauren
-Así será Camila - terminé la llamada y me quedé pensando un poco, si bien Camila había sido mi primer amor, podía ser posible que alguien más llegara a mi vida así como ronnie llegó a la suya.
Decidí marcharme de casa de Camila una semana después, el estudio de ronnie estaba listo y yo ya había amueblado aquel apartamento que renté, era hora de irme. Dos días después de haberme instalado en el apartamento recibí una llamada de Camila
-Se te hace costumbre llamarme - ella rió
-Sólo te quería agradecer, Ronnie está muy feliz con su estudio, quedó increíble, de verdad increíble, una revista vendrá a fotografiarlo mañana, todos los créditos serán tuyos
-No era necesario que lo hicieras
-Ronnie quiere esas fotografías, le encantó el lugar, de hecho parece un niño con un juguete nuevo, lleva ahí dos horas viendo todo
-Me alegra que le gustara, al final por ella se hizo
-Gracias lauren
-Gracias a ti Camila
Varios meses pasaron desde la última vez que había visto a Camila y hoy era la premier de aquella película para la que ayudé en las escenografías, gracias a eso tenía dos boletos para la alfombra roja. Claro que sabía a quién invitaría y esa era mi novia Emily.
Había conocido a Emily un día en una cafetería, ella me miraba desde otra mesa, yo simplemente me preguntaba si era que realmente me veía a mi, yo estaba leyendo un libro cuando de repente se sentó frente a mi.
-Creo que mirarte casi por una hora entera no funcionó
-A mi? - respondí estaba segura muy sonrojada
-Claro que a ti, mi gaydar nunca falla, no puede fallar contigo - No pude evitar reír y cerré mi libro
-No, no ha fallado