La novia pelotuda (Diabolik Lovers)

1

Fabi POV:

Boludo me acabo de perder, no se dónde conchas estoy. "Ve a la mansión sola" decían "La encontrarás fácil" decían, ¡pues adivinen donde estoy! ¡En un punto callejón sin saber a donde mierda ir!

A lo lejos ví como alguien se me acercaba muy sospechosamente, y eso cuando pasa en mi país y estás acorralada ¡significa peligro! ¡Correle pendeja, vuélvete Spiderman y corre, mierda! ¡Voy a llorar, me van a secuestrar!

—Hola señorita, tú debes ser Fabiana

Ay no, ¡sabe mi nombre! ¿Cómo sabe mi nombre? ¡Estoy jodida!

—¡Espere, wait a minute! ¿¡Como mierda sabes mi nombre!? ¿¡Quién eres, quién te mandó!?— El sujeto me miró confundido

—Señorita, la mandaré a la mansión Sakamaki, ya que se le ve un poco desorientada— ¿Tanto se nota?

—Ahh, ahora tiene más sentido... ¿tanto se nota que me perdí?

—No creo que a una chica se le ocurra venir a caminar por los oscuros callejones de la ciudad sola— Me cago en mi padre que no me quiso traer, ¡estoy pasando la mayor vergüenza con un hombre mayor que aún no entiendo cómo sabe mi nombre, o siquiera como me encontró!

Bueno, cuestión que ese tipo me llevó en alta limusina, ¿a dónde me fui a meter? Era alta mansión boludo, no puedo, me voy a perder segurísimo

—Hasta aquí la dejo, que tenga un buen día— El tipo se fue, y ahí quedé yo como estúpida parada en medio del patio de la mansión

—... ¿¡Así nada más me dejan aquí!? ¿¡No me acompañan ni para ir a tocar la puerta!? ¡Me da vergüenza! Ok, cálmate pendeja, cálmate, ¿que es lo peor que puede pasar? Digo, no es como si hubieran fantasmas o algo así— Cuando fui a tocar la puerta un rayo cayó prácticamente a mi lado, a lo que obviamente me asusté, me dí contra la puerta y todavía me caí de culo, che no, así no da. Lo peor es que la puta puerta se abrió sola, muy bien Fabi, si estuvieras en una película de terror, ¿qué harías? ¡Obviamente entrar a la mansión embrujada, claro que si! ¡Adelante hombre, sin miedo!

Apenas entré a la pedazo de mansión la puerta se cerró, lo peor es que no había entrado por completo y la puta puerta me pegó el trasero

—¡Puta puerta! ¡Ten más cuidado, ¿no ves que me dolió?!— Le grité a una puerta, si, ¿qué pasa?

En fin, deje a la puerta tranquila, sinceramente no sabía dónde mierda estaba. Llegué a una especie de sala, arriba del sillón había un chico pelirrojo durmiendo en él, ¿no sería bueno hacer una pequeña broma de bienvenida? Nah, mira si es alto violador, mejor me devuelvo y hago como que nunca lo ví, me busco otro lugar a donde ir, yo que se, pero acá no me quedo ni a palo

Me alejé un poco pero sentí como me agarraban del brazo con fuerza

—¿¡Que te pasa putito!? ¿¡Quere pelea!? ¡Dale, sin miedo!— El pelirrojo solo me vió con cierto desagrado. No mames qué feo que está

—Ayato, deja a la chica— Habló otro tipo con lentes. Aceptable

—Esta idiota está diciendo cosas que no entiendo, no es mi culpa

—¡Claro que lo es, y para tu información, era español, puto!— Me liberé del agarre, pero hice tanta fuerza que casi me caigo pa trás

—Solo no le hagas daño, es otra novia de sacrificio

—¿Otra?

—Oigan, ¿qué?— ¿Otra? ¡Wey noo! ¡No quiero ser novia de alguien tan feo!

—Eso es imposible, nunca hemos tenido dos novias al mismo tiempo— Habló ese pelirrojo, creo que se llamaba Ayato. Espera, ¿hay otra? Bueno mientras ellos discuten yo me iré lentamente...

—Oye, ¿a dónde vas?— Mierda, me choqué con alguien mientras retrocedía

Levanté la mirada, mierda que si son altos. Un chico de pelo blanco con puntas violetas me tomó del brazo, tenía una mirada que no me gustaba nada

—No me toques, putito— Intenté liberarme pero éste tenía más fuerza que el otro, cagué— ¡Pero soltame!

—Subaru— De nuevo mi angel salvador....— Suéltala

—Boludo acá si que hablan formal, no me gusta, yo les enseñaré a hablar como la buena latina que soy— El tipo me soltó— Bueno— Saqué mi bate de la mochila— Comencemos con la clase

—¿Para qué el bate?— Preguntó el más feo

—Ah, por si alguien más me toca, ¿podemos continuar? Gracias. Miren, el primer insulto que les enseñaré será ¡la puta madre!— Grité al ver que un chico castaño de ojos verdes apareció justo al frente de mí— ¡mierda, casi me cago!— Puse mi mano en mi pecho, latía con fuerza

—Laito...— Murmuró con molestia el de lentes, bueno, a este si le doy

—¿Uh? ¿Otra Bitch-chan?— La cagó

—¿Cómo fue que me dijiste?

—Cuidado Laito, es brava— Dijo el feo

—¿Eh?— Le pegué con el bate en la entrepierna

—¡Perra será tu madre, hijo de puta!— Y me fui así bien cool con el bate a arrastras