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Luego de la pelea con la china esa, acordamos con que íbamos a ir a alguna cafetería o algún lugar para charlar, ya había pasado mucho tiempo desde que nos vimos por última vez

—Quitense, estorbos— Habló un poste de luz, Fabi se quedó viéndolo como boluda pero yo solo me acomode el pelo al lado izquierdo para comenzar mi tercera pelea del día

—¿Qué dijiste, maldito poste de luz?

—¡No, no! ¡Emma!— Ella me intentó parar pero no lo iba a conseguir, no mi amor, nadie me dice estorbo

—Lo que escuchaste— Habló el acompañante del poste de luz, hombre, éste está lindo, pero no dejaré que me pisoteen solo por una cara bonita

—Tsk, tú eres la cerda de la otra vez— El poste de luz señaló a Fabi, ahora es cuando ella reaccionó

—¿Perdón? ¿Cómo me dijiste? ¿¡cerda!? ¡Me cago en tus muertos, la concha recontra peluda de tu madre!— Y así empezó a putear al titán, mientras yo me peleaba con el cara bonita

—Tan solo tenías que hacerte a un lado, estorbo— Me dijo serio

—¿Y quién te crees que sos para decirme qué hacer? No sos mi mamá, y por más que lo fueras tampoco te haría caso. Aquí las cosas se piden por favor— Crucé los brazos

—Eres una niña muy maleducada, ¿eh?

—Pues esta niña maleducada te puede bajar los dientes de un puñetazo— El tipo golpeó la pared— Ay si, mucho miedo me das golpeando la pared— Hablé con sarcasmo

—¡Me secuestran! ¡Ayuda!— Escuché la voz de Fabi, nosotros volteamos y el poste telefónico la estaba cargando como un saco de papas— ¡Oye! ¡Bájame por la madre que te parió!— Ella pataleaba, pero él no le daba importancia alguna— ¡Emma, ayuda! ¡Me van a violar y esta vez no es la pierna!— Me comencé a reír por la pequeña anécdota que me había dicho sobre el perro, a ésta chica si que le sucede de todo— ¡No te rías y ayúdame!

—¿Que no ves que estoy en mi pelea? Después te busco

—¡Emma, la concha de tu madre! ¡Abandonica!

—¡No hables así de mi mamá, maleducada!— Y se la llevó, yo por mientras seguí peleando con éste chico que tenía al frente

[...]

—Creo que me resfrié— Dijo Fabi, estaba toda mojada, una parte fue por mi culpa y la otra por el titán colosal, y pues la tuve que traer en donde me estaba quedando yo para secarla por lo menos un poco

Flashback

Narra Fabi:

¿¡A dónde carajos me lleva éste!?

—¡Suéltame, puto!

—Tienes un pequeño asunto con Kou, ¿no es así?— Hey... yo conozco este pasillo... ¡no a la piscina!

—¿¡Kou!? ¿¡Quién es Kou!? ¡No, ni idea, no lo conozco!— Me hice la pendeja y comencé a patalear nuevamente, no quería que me tiraran a la piscina

—¡Ah, Mneko-chan! Es bueno verte— Me habló la rubia oxigenada apenas pasamos la puerta del pasillo, tenía una sonrisa muy sospechosa

—¡Sueltenme! ¡Yo no hice nada! ¡Ni lo conozco! ¡Se confundieron de persona!— Seguí pataleando

El titán vió al rubio oxigenado y luego sonrió

La novia pelotuda (Diabolik Lovers)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora