El hechizo de su mirada

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A los días de despedir a Zee y a Saint, retomaron la rutina Ohm dirigía sus negocios y Fluke enseñaba artes a los pequeños lobos del clan, por las tardes después de comer se transformaban en lobos y recorrían el bosque a su alrededor y por las noches daban rienda suelta a la pasión.

Como si despertara de un sueño, dejando atrás su vida de pesadilla, Fluke no podía creer que había encontrado a su pareja destinada, que fuera "El diablo" quien lo volviera loco e hiciera detener su corazón; viéndolo tendido a su lado, se levanta sigilosamente para ir a prepararle desayuno pues Pinneare y su pareja habían salido de fin de semana, cuando siente que lo toman de la mano con fuerza.

-¿A dónde crees que vas?

-Muere de hambre ¿tú a donde crees que voy?-viéndolo estirarse en la cama.

-Tu irás a tomar un baño-besándolo con pasión- Yo iré a preparar el desayuno.

-¿Cocinas?

-¡No soy tan mal cocinero!

-Si tú lo dices-viendo como Ohm intenta tomarlo, pero este logra escapar hacia el baño.

-Pequeño brujo, no te escaparás tan fácil de mi-gritándole a través de la puerta.

Mientras Ohm se dirigía al otro baño, no dejaba de pensar en la belleza de su pequeño lobo blanco, ahora era suyo y solamente suyo y no iba a permitir que nada ni nadie lo alejara de su lado, si tenía que matar a Nuk lo haría sin pensarlo.

-Haré todo lo posible por hundirte Nuk Namwirote... si fuiste la culpable de todas y cada una de las desgracias de la familia de mi lobo... te aseguro que tu muerte será lenta y muy dolorosa.

Cuando terminó de bañarse, Fluke se miraba desnudo al espejo, viendo las cicatrices que por años le habían dado miedo y dolor, ahora no le daban la misma impresión, pues Prem le dijo una vez que las viera como heridas de guerra, y ahora que lo pensaba detenidamente eso es lo que eran, aunque mas que de guerra las sentía como heridas de batalla pues algo muy dentro de él le decía que la guerra contra Nuk Namwirote aun no empezaba. Colocándose unos pantalones de mezclilla y un suéter ligero de color rosado baja a la cocina para ver a Ohm asesinando unos tomates.

-Existen otras formas de hacer puré de tomate... déjame hacerlo-quitándole el cuchillo de las manos.

-Se supone que lo haría yo...

-Tú dedícate a preparar el café ¿quieres?

-Cuando termine el trabajo de oficina, quiero darte una sorpresa.

-¿Qué es?- diciendo entusiasmado, viendo al alfa negar-¡Vamos Ohm!

-Deberas esperar- tomando sus labios para besarlo.

Después de tomar el desayuno, Ohm se fue a su junta con Boun, Tay y New, dejando a Fluke y a Prem solos , aprovechando para llamarle a Earth.

-¿Cuándo pensabas comunicarte?

-Lo siento... hubo ciertas cosas que se salieron de mi control-ruborizándose.

-¡Tienes que venir a verme! Ya sabes dónde está la oficina de Kao en la ciudad, tenemos un penthouse en el edificio así que mas vale que vengas... trae a Prem también.