Capitulo 1.

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Soy Silvana y esta es mi historia. 

Todo comienza hace cuatros años atrás. Tenía exactamente 17 años, comenzaba mi primer y ultimo año escolar. Para cientos de personas de mi edad este sería un año emocionante, estás a un paso de la libertad, de ser una persona "adulta" e ir a la universidad, estamos a nada de dejar el nido. Pero al contrario, para mi era un año complicado, nunca pude salir mucho de mi casa, nunca decidí aventurarme a fiestas por lo que mi circulo social era pequeño, extraño... "freak". La verdad, no sé el por qué de estas decisiones de apartarme del resto de las personas de mi edad, me ocultaba en la idea de que aquello era "tonto", y que yo no era parte de ese entorno.

Prefería quedarme en casa leyendo, escribiendo historias de monstruos y de asesinos sádicos, nada me hacía presagiar que una de esas tantas historias que escribí, iba a ser mi futuro, pero como todas mis historias terminaban por ir al tacho de la basura y siendo olvidadas. 
Por todo aquello que les conté es obvio que pueden entender que, era una niña un poco egocéntrica en cierto aspecto, pero a su vez insegura con nula capacidad de interactuar con mis pares. En ese entonces no aceptaba que era una adolescente insegura y que me faltaba por crecer, sentía que tenía la verdad absoluta a mis pies y lo que salía de mi boca era la razón, con el tiempo comencé a entender que estaba errada. Que me torné el bicho raro de mi salón debido a esto, porque no compartía la forma de ver las cosas con mis compañeros y no tranzaba. Tal vez era por mi edad, no lo sé.

Este año me preocupaba más que nada porque algo dentro de mi, sabía que había perdido tiempo para vivir mi adolescencia como el resto. A su vez me preocupaba intensamente el rompimiento de mi relación con un chico, el cual amaba intensamente y que de un día para otro, él decidió hacer volar las cartas de la frágil torre en la que descansaban. 
Ahora comprendo que esta relación terminó por mis inseguridades tanto de mi cuerpo como de mi carácter, eso combinado con la nula relación que tenía con mis pares llevó a desarrollar una dependencia emocional que lo consumía y no dejaba que se desarrollara como él deseaba.

Toda esta situación me llevó a pasarlo mal, a fijarme aún más de mi estatura baja y mi peso alto.  En ese periodo no se hablaba de lo que ahora es "la aceptación del cuerpo" o de "amarse tal como uno es". Estamos hablando de esos años en los que todos consumíamos el estándar inalcanzable de "Las chicas tumblr", era inalcanzable al menos para las niñas de la zona geográfica en la que me encontraba. Aún siendo inalcanzable,nadie deseaba rendirse sometiéndose desde dietas a ejercicios extremos..o una combinación de ambas.
Comentarios destructivos entre compañeras mermaban el autoestima de cada una de nosotras.

Yo no era la más simpática,ni la mas bella y muchos me lo hicieron saber mediante diversas plataformas de Internet anónimas que no tenían mas fin que romper lo poco y nada que te mantenía en pie en ese entonces. La crueldad de los adolescente no cesa y puede ser tan agresivo como una marejada o un terremoto en un lugar costero. Por ello había decidido dejar de comer, no lo había decidido como tal,  simplemente mi cuerpo rechazaba toda comida que intentaba consumir. Cada vez que me aventuraba a consumir un bocado, el estomago se me ponía de cabeza, sentía como las tripas decidían anudarse y comenzar a tirar con fuerza entre ellas, a tal punto que sentía que si en algún momento, por cosas de la vida decidían tirar con mas fuerza, en algún momento mi cuerpo implosionaria y desaparecería sin dejar rastro. Pensaba que tal vez eso sería un milagro. 
Esto se mantuvo durante meses, a lo que mi peso disminuyó notablemente. Con esto mi seguridad algo había retornado y por ello mis ganas de seguir mi vida habían aflorado nuevamente.

Comprendo en este punto que tal vez para algunos, esto es un problema bastante superficial, bastante llevadero. Pero no para todos y menos para una niña de diecisiete años que aún no sale del cascarón, que su única preocupación tan solo se limita a su familia y a la escuela. Ahora que lo veo en retrospectiva, claramente no había una razón de peso para que yo dejase de consumir alimentos o por qué decidía mantenerme al margen del resto de mis pares. Pero en ese entonces, todo me parecía lógico. 

Los comentarios destructivos no cesaban para nada, pero al verme en el espejo mi autoestima había aflorado y por ello me podía mantener a flote. Con esta poca energía que mi cuerpo empezaba a retomar de los alimentos que volvía a consumir. Empece a buscarme a mi misma, entre canciones,series y libros...

Por cosas del destino encontré un libro en uno de los tantos stands de la biblioteca a la que siempre recurría. Era mi lugar favorito de cierta manera, debido a que su silencio me reconfortaba tal como un niño se reconforta en su manta en plena siesta. Era un lugar cálido, desde su ambiente hasta sus colores de madera recién barnizada y ese olor a vainilla/caramelo que nunca supe de donde venía. Era un edificio recién construido, uno de los pocos bonitos en ese pueblo pequeño. Estaba construido en una especie de risco bastante alto en la costanera del pueblo, podías ver el mar, los palafitos construidos en la orilla de este y el puente que conectaba las dos partes del pueblo, al otro extremo del mar se podía ver en una colina llena de arboles y una construcción de cemento (una de las cosas que más recientemente habían llegado al pueblo en una manía por actualizar el sector,era un casino en este pueblo olvidado). Todo esto podía verlo en la ventana enorme de la biblioteca, que bien podía suplir toda esa pared de extremo a extremo. 

El libro que había encontrado lo llegué a amar, a tal punto que sentía que esperó por mi los 110 años que existían desde su primera publicación en el año 1820, hasta el punto en que ahora me encontraba. 

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⏰ Last updated: Aug 07, 2020 ⏰

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