Naruhina _*LA MENTIRA*_

Cap 4 Cuando lo deseé

Deseaba disponer sus cosas, limpiar el piso, arreglarlo, ya que durante la semana no podia, y no tenia ni asistenta ni interna. Además había quedado de verse con Toneri para contarle el cambio que iba a hacer en su trabajo, o que mas bien ya había hecho.

Él timbre de la puerta sono y Hinata fue tranquila a abrir sabiendo de antemano que seria Toneri quien estaba detras de esta.

Toneri era un tipo silencioso, sosegado y sobre todo sensible. Pero si bien nunca gritaba ni se enfadaba, sus ojos azules eran tan expresivos que solían manifestar su malestar o enfado a través de ellos.

-Hinata, mi amor que gusto volver a verte- saludo con mucha alegria y dándole un beso

-Toneri bienvenido, como te a ido en Segovia?

-todo a ido muy bien, nada fuera de lo normal. Estas lista para que salgamos?

-Ire por un suéter, esperame én la sala

Después ambos salieron.

Estaban comiendo en una cafeteria donde había varias mesas separadas por un biombo. Una de ellas, la mas arrinconada, la ocupaban ellos. Fue entonces cuando Hinata le contó él cambio que había hecho en él trabajo. Toneri no tardo en demostrar su disgusto

-no me gusta. No me gusta nada, Hinata. Lo debes entender

-Entiendo tu postura- dijo Hinata- pero también tu debes entender la mia

-Ya, pero la mia tiene mas lógica

-Eso no lo sabemos Toneri. Y no, por que el que yo desee trabajar es lo mas normal del mundo. Lo llevo haciendo cuatro años y a ti te conoci el año pasado

-Y bien sabes que lo que siento por ti no es ninguna broma

-Pero yo no se si mi relación contigo es firme o no

-Eso sera por que tu lo dices. Yo voy en serio contigo, en firme- tomo su mano por sobre la mesa

-Pero yo no acepto aun esa firmeza

-No me quieres.- la soltó de repente y se recostó en su silla- Di que no me quieres y acabas antes. ¿Por que buscas otro trabajo si yo te ofrezco él mejor? Primero él de contable de mi negocio y después, el día que tu quieras, el de mi esposa

-Por si nunca llego a ser tu esposa, prefiero ser libre en el trabajo, no que la falta de este me lleve a casarme

-Eso sera si tu quieres

-Toneri, esto lo tengo decidido

Toneri se puso serio

-Me haces polvo

-Pero, ¿Por que?

-Por que yo deseaba casarme contigo cuanto antes. No hay nada que lo impida y te amo

-Pero para que dos personas se casen se tienen que amar mutuamente, ¿no es asi?

-Claro

-Pues yo no tengo seguro lo que hare aun

-Mi posicion económica es buena

-Toneri, cuando me case me importara poco el dinero

-¿Pero que es lo que te importara entonces?

-Sentirme bien junto al hombre que va a compartir mi vida. Sentir que lo deceo, que a su lado soy inmensamente feliz

-Y a mi lado no sientes aun nada de eso- inquirió un poco ancioso

-No, del todo no- dijo desviando levemente la mirada

-Pero cuando nos besamos...

-Me da gusto, si- le interrumpio