"¿Como es que creciste tanto, Yuri?, ¿Como cambiamos tanto? Aún recuerdo..lo llorona que siempre has sido desde pequeña, La confianza que tenías para mostrar tus sentimientos frente a mi, Todo me causa bastante nostalgia.Yo por el contrario nunca quise mostrarte mis sentimientos. Nunca lloré frente a ti, ¿Porqué? Ni si quiera yo lo se...Creo que, Solamente quería lucir fuerte. Quería que confiaras en que tu mejor amiga era una persona fuerte y que siempre te cuidaría.
Quería ser tu refugio, Protegerte, Hacerte feliz y confiada, Quería estar ahí para ti siempre.
¿Lo he hecho bien?
Por alguna razón mis pensamientos repiten tontamente que no, Una y otra vez.
Lo lamento, Quizás no fuí lo suficientemente buena.
Quizás estoy siendo egoísta, Pero, Quiero levantar mi cabeza y verte al frente mío, Sonriendo inocentemente como antiguamente lo hacíamos."
En tan solo un pestañeo aquellas dulces niñas ya habían crecido, Tal como dicen, "El tiempo vuela".
Los años volaron a través de ellas, Aún así cada año se sentía perfectamente aprovechado, Con recuerdos memorables que probablemente nunca serían olvidados.Todo a su alrededor parecía haberse ampliado.
Incluso su circulo social había crecido, Si bien estas dos seguían siendo las más cercanas, Algunas personas se habían incorporado a ellas.
Desde que se conocieron debido a que Yena persiguió tres calles a Yuri sólo para devolver el paquete de gomitas que se le había caído, no volvieron a separarse, Nunca dudaban la una de la otra, Muy pocas veces peleaban y cuando llegaban a hacerlo no pasaban más de quince minutos antes de que se perdonaran (Con Yuri llorando, Por supuesto)
En retrospectiva Yena está fuertemente acostumbrada a pasar sus días con Yuri y reversamente.
Tal como de pequeñas, Yuri pasaba más tiempo en casa de Yena que en la suya.
Yena vivía sola, Por esto Yuri intentaba hacerse presente siempre que podía.
Se suponía que la mirada de Yuri estuviera en la tenebrosa película que Yena había elegido, Claramente no la vería, Ella odiaba ese tipo de cosas.
Prefería ver el perfil de la mayor a ver aquella película, Sin duda era mucho mejor.
Yuri siempre había sido extremadamente sensible, Odiaba eso de ella misma. Era llorona, Cobarde y sobre todo débil. Aún así Yena disfrutaba de protegerla, Yena nunca se burlaba de ella, Yena la quería incluso si era una llorona a la que lo más mínimo le afecta.
Los ojos de Yena vagaron hasta encontrarse con la mirada de Yuri, Hoy era un día de pijamada en la casa de Yena (Donde siempre solían ser)
Sonrió apoyando su frente en la de la menor.
- Te dió miedo la película, jjoyul?.- Cerró sus ojos sin moverse, Ignorando completamente la película que se estaba reproduciendo.
- quizás un poco, Bastante poco...- Rieron al compás mientras los brazos de Yuri envolvían el cuello de Yena queriendo tenerla más cerca.
Porque con Yena ella nunca había sentido ni la más mínima gota de timidez, Yena la hacía sentir segura en ella misma
La paz interior que se producían la una a la otra era realmente irreemplazable.
Yena se acercó mientras unía por unos segundos sus labios con los de Yuri. No era primera vez que sucedía, A pesar de que no fueran pareja.
La sensación era casi indescribible, Yena sólo pensaba en una forma de describirlo y era "Una explosión de colores" Porque honestamente los colores que volaban en su corazón (Causando diferentes emociones) eran miles y miles.