Capitulo 1

15 0 0
                                    

Trece años de ella, cinco años sin ella. Cinco años juntas a travez de solo una pantalla.

Mis emociones estaban alborotadas. Todo mi interior era tsunami.

Quería vomitar, quería llorar, gritar, reír, hasta tirarme al suelo de la emoción. Pero aun asi sentía que no sería suficiente como para expresar lo que sucedía dentro de mí.

Cinco años...

Cinco años...

Cinco años...

Pequeñas? Yo a no lo éramos...

Por mi parte a próximo de los diecinueve, ella, dieciocho.

¿Cuando paso el tiempo?

Mí corazón palpitaba fuerte mientras bajaba del avión, sentía mucha ansiedad, busque mi maleta en el aeropuerto.

Definitivamente. No era la primera vez que viajaba. Pero sentía el mismo nerviosismo, como la primera vez.

Busque con ansias el cartel que indicaba mi nombre.

Suspire una y otra vez tratando de contener mi emoción y las lágrimas a punto de desbordar mis enrojecidos ojos

Hasta que la enfocaron. Con un vestido rosa pastel veraniego, sandalias marrones y su cabello negro y espeso cubriendo sus hombros.

Mí mano cubrió mi boca, ella estaba muy grande y muy hermosa, creció demasiado.
Sollosos se escaparon de mi y la vi saltar de la emoción, al igual, la barandilla que se encontraba frente a ella, y corrió hacia mi como si fuera a escaparme.

También me impulse hacia ella, chocando en un abrazo cargado nostalgia, de tristeza y felicidad combinada. Habíamos estado demasiado tiempo separadas.

_Eres tú, tonta- hable, y ella río.

_Estas aquí, hermana, c-co-como lo prometiste- dijo entre llanto-_ Como lo prometiste-

_Estoy aquí, tranquila- la abrace y deje que llorara todo lo que necesitaba.

Mí mente no podía creer que esto pasaba.

Suspiré, y la mire a los ojos, cuando se calmo.

_Te extrañé demasiado-

Caminamos por el aeropuerto en dirección al auto donde ella vino. Kayla solo estaba abrazada a mi, no quería soltarme.

_Kayla, yo también te extrañe mucho, pero si sigues apretándome así moriré asfixiada- dije jugando.

_Estefi, tienes tanto que contarme, y yo también tengo que contarte tanto ¿Y Gabriel? ¿Y Alejandrina? ¿Cómo estan? También debían venir - sus ojos negros brillaban de emoción y los mios solo soltaban lágrimas de felicidad

_Te prometo que te contaré todo, cada detalle, pero primero quiero descansar, tengo mucha hambre y sueño- reí un poco. También había cosas que no eran muy felices que contar y necesitaba encontrar fuerzas para soltarlo.

_Claro que si, no sabes, mi casa ahora es muy grande, aunque los Müller casi nunca estan y el que me cuida casi siempre es mi hermano adoptivo mayor, que es muy sexi por cierto, es modelo, trabaja para la agencia Golden, y hay una playa enorme, se que no te gusta la playa pero en la noche te encantará- hablaba rápido y emocionada, así era ella cuando estaba feliz-_ Paul, mi hermano adoptivo, el nos esta esperando en el auto- eso me hizo fruncir el ceño

_Espera... Pensé que tomaríamos un taxi, Kayla, vine solo para visitarte a ti, no a ellos...-

_El insistió, sabes, el también me cuida mucho, no es malo, no te enojes, por favor-

Sabía que Kayla era bastante fácil de persuadir asi que intenté no molestarme. Esa familia, le tenía amor-odio, mas que nada odio, ya que se llevaron a Kayla muy lejos de mi, pero trataba de ver el lado bueno, a ella no le faltaba nada, y me refiero a cosas materiales.

Pero no estaba segura de como reaccionaria delante de un Müller.

_Esta bien Kayla- suspiré- _ No los odio, no los conozco básicamente- mientras hablaba trataba de convencerme de mis palabras a mi misma-_ Además, ellos te mantuvieron bien, eso es muy importante para mi- sonreí calida-_ vamos, niña.

_Eyy. Solo soy un año menor-

_No importa, sigo siendo mayor, y voy a cuidarte como mi hermana pequeña- hable divertida.

Reímos mientras hacíamos bromas sin sentido entre nosotras.

Cuando Kayla se detuvo y me señalo el auto y madre mia que auto.

Pero eso no fue lo que me sorprendió mas, si no que fue el chico de cabello rubio dorado que estaba recostado sobre este mirando su teléfono.

Kayla tenía razón, era sexi. Nos acercamos a el.

_Pa!- habló Kayla.

¿Pa? Que...

_Ella es Estefanía... Estef, el es Paul- interrumpió mis pensamientos.

_Hola, un gusto- sonreí un poco forzado mientras le tendía la mano

Solo me miró con un poco de altivez.

_Soy Paul, ahora, vamonos- dijo cortante y se fue directo al asiento de conductor.

Okay, que grosero. Enserio? Esperaba que el estereotipo de altivez de los riquillos fuera solo eso, un estereotipo, que en realidad no fuese así. Y tenía esperanzas, porque no era con el primero que trataba. No todos eran malos, pero la mayoría. Eso quería creer.

Mire a Kayla, que me la devolvió apenada por el comportamiento de Paul. Guardé mi maleta nos subimos al coche y nos fuimos.

La casa era preciosa, tenia una gran patio de frente, una fuente de cada lado del camino y arbustos verde, flores de distintos colores. A mama le encantaría ver esto.

Tome mi cámara fotográfica ,y capture la belleza que percibían mis ojos.

Luego, fue solo conocer la casa. El dia ya estaba terminando, ya casi era de noche y estaba sumamente cansada.

Hable un poco mas con Kayla y luego decidimos dormir para renovar fuerzas y hablar TODO lo que por cinco años, quizás lo hablamos por teléfono, pero no era lo mismo tenernos la una a la otra físicamente, otra vez...




Todo por ti, hermana.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora