One shots -Camren y tu G!P-

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Lauren y tu
Omegaverse

Cerré los ojos al sentir como mi semen se escurría por mi abdomen, los gemidos de la chica habían aumentado mientras se metía tres de sus dedos y acariciaba su clítoris, la chica era blanca y su vagina se miraba exquisita sin vello alguno.

Apagué mi celular y limpie mi abdomen al igual que mis manos, nunca he tenido sexo en mis dieciocho años de vida y me da un poco de vergüenza que mi novia lo sepa, ella tiene veintiún años y aunque sea más grande que yo por dos años, ella me gusta mucho.

Suspire y me dormí al pensar en las clases que tenía mañana además que me iba a juntar con mi hermosa novia.

Al despertar me quedé observando el suelo, era muy interesante a éstas horas del día, el reloj apuntaba las cuatro y yo me decidí en levantarme para ir a bañarme.

El agua tibia caía sobre mi cuerpo desnudo y eso relajaba a mi cuerpo por completo, cerré los ojos mientras el agua se hacia cargo de quitar el shampoo de mi cabello con  ayuda de mis manos, terminé de quitar el jabón de mi cuerpo y apagué la ducha.

Terminé de ajustar mi corbata azul con rayas negras, observé que mis zapatos estuvieran lustrados y al comprobarlo sonreí, me aseguré que el cincho estuviera bien, doble el cuello de mi camisa para colocarlo de forma correcta, ajuste el saco y al estar lista agarre mi mochila junto a mi teléfono y audífonos.

-Apurate mija el bus ya va a llegar.- Frunci el ceño al escuchar a mi madre omega decir eso, no entendía el idioma español.- Que te apures, no quiero que el bus te deje como paso la semana pasada.- Sonreí al escuchar su mala pronunciación en Inglés pero era entendible.

-Adiós campeona.- Mi madre alfa, Verónica, choco el puño conmigo y revolvió un poco mi cabello.

-Que guapa te miras amor, quiero que me des duro hoy.- Las dos miramos con el ceño fruncido a mi mamá Lucy, nos seguía hablando en español.

-Supongo que nos esta dando las bendiciones, ya sabes, mamás latinas.- Mi madre asintió de acuerdo y yo salí de mi casa justo a tiempo, entre al bus que estuviera vacío si no fuera por el chófer.

Me senté hasta atrás y coloque música en mi teléfono, acomode los audífonos y al rato ya estaba durmiendo. Desperté exaltada al sentir como el bus pasaba en un túmulo sin frenar.

-Mierda.- Escuche el susurro de alguien y sonreí al saber de quien se trataba.

-Al chófer siempre se le olvida ese túmulo.- Susurre con la voz ronca mientras le hacia un espacio en mi asiento.

Observe el bus y casi se llenaba, supongo que aún falta media hora para llegar a la universidad. Camila se sentó a la par mía y sacó su celular con una sonrisa traviesa.

-Mira lo que me mando Dua ayer, me costo conseguirlo pero al final lo logre.- Observé las fotos de mi compañera totalmente desnuda, en otra se estaba metiendo dos dedos en la vagina y miraba directo a la cámara.

-Camila... controla a la bestia.- Escuche la risa de mi otra amiga, Normani Hamilton.

-Ya quisieras tener el tamaño que mi bestia tiene.- Y así empezamos una guerra de quien la tenía más grande, Normani quedo en primer lugar, yo en el segundo y Camila en el tercero, cabe decir que empezó a maldecir en todo el caminó que quedaba.

-Recuerden siempre utilizar condón cada vez que vayan a tener relaciones sexuales, no solo por posibles embarazos sino que también para protegerse de cualquier enfermedad, ahora les enseñaré a como colocarse un condón.- Todos empezamos a reír cuando la maestra colocaba un condón en un pepino.

-¡Mejor hagamelo a mi!- Escuché el grito de Normani y como todos se reían  con más fuerza, la profesora Allyson, una omega de estatura baja la miro con enojo y siguió dando la clase, no era sorpresa para nadie que entre ellas pasaba algo más allá que una relación de profesora a alumna.