Allí estaba ella de nuevo, bailando una canción imaginaria para mí.
Yong Sun se veía radiante en ese vestido rosa con tirantes (aunque para ser sincera, su belleza no estaba precisamente ligada sólo a lo que llevaba puesto). Me daba miedo, me daba miedo querer tocarla tanto, así que como excusa para no distraerme en sus hombros desnudos le pasé mi suéter para que se protegiera del frío.
Ella me quemaba y estoy segura de que ni siquiera se daba cuenta.
—-¿Byul? —dijo mi nombre de repente, mientras levantaba las puntas de sus pies y daba pasitos delicados delante de mí.
—¿Mh?
—Baila conmigo.
Suspiré.
—Mejor deja de tontear, me da algo de miedo caminar por la calle tan tarde —le dije. Cosa que en parte era cierta.
Acabábamos de salir de la casa de unos amigos cercanos y estábamos pasando el rato alejadas del ruido de las personas de adentro, lo único que quería era volver a nuestro apartamento y dormir, pero a Yong Sun le hacían mucha ilusión ese tipo de reuniones en donde la gente se emborracha con vino mientras tocan el piano y terminan dando discursos pretenciosos sobre cualquier tema, así que yo le hacía compañía para que ella no se viera en la posición de la persona levemente intoxicada.
—Oh, vamos... —Me extendió su mano—, no hay nadie aquí.
—¿Bebiste mucho hoy? —pregunté a modo de broma.
Ella se rio.
—Sólo lo suficiente —se limitó a contestarme.
La vi a los ojos y comencé a librar una batalla mental para decidir entre si debía tomar su mano o no, al final fue ella la que se acercó rodeando mi cintura con sus brazos.
Sentí el impulso de besarla ahí mismo, pero recordar que estábamos en público hizo que me guardara ese deseo en la garganta.
—No hay nadie aquí —volvió a repetir, como si se hubiera imaginado lo que yo estaba pensando.
Le sonreí y uní nuestros labios en un beso breve, de esos que requieren mucha fuerza de voluntad para no continuarlos.
—Baila conmigo, Byul —dijo en un tono más suave.
Esa vez le seguí el juego, feliz de que por primera vez en mucho tiempo a Yong Sun le diera igual que la gente se nos quedara viendo.
