Margaritas

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100 margaritas he cultivado,
en mi aburrido pero feliz condado.
Con una fogata en la playa he soñado,
y en un círculo con mi amigos he cantado.
Con mi mejor amigo he jugado,
y juntos en el río nos hemos coqueteado.
Pero ahora todo ha cambiado,
pues todo eso ha quedado en el pasado.

Hace mucho el centro del pueblo no visitaba,
para no ver a la persona que deseaba.
Desde aquel día no lo veía,
pues miedo a hablarle de nuevo tenía.
Aveces paseos por mi mente tengo,
y siempre en ese día lo recuerdo.
Leyendas sobre mejores amigos leo,
y el mismo final siempre veo.

En una isla solitaria aveces quiero vivir,
pero escapar del pasado es no dejarlo ir.
Así que un día por fin al mercado fui,
y supuse que estaría allí.
Pero al llegar nada fue así,
pues hacia Australia se iría hoy a vivir.
Corriendo a su casa llegué,
y subiendo las maletas en su auto lo encontré.

Mi Volkswagen amarillo en su jardín estacioné,
y luego de años al fin lo volví a ver.
Muy nerviosa estaba pero al ver su sonrisa,
supe que hacia él tenía que ir deprisa.
Su latte medio favorito le obsequié,
y una charla en su jardín le robé.
Mis disculpas y mejores deseos le dí,
y como en el pasado mucho me reí.

El tiempo muy rápido pasó,
y un avión hacia Australia voló.
Una persona muy importante en él se llevó,
y hasta ese momento mi corazón se quebró.
Evitando este amor por años pasé,
pero ví que cada vez más lo amé.
Entre mis 100 margaritas lloré,
pero algo al respecto decidí hacer.

Al final de todo a una isla iría,
la diferencia es que esta sola no estaría.
Esta vez lo que no pasó en el río realidad lo haría,
pues por fin sabía lo que mi corazón quería.
18 horas más tarde en un nuevo lugar estaba,
y bajo la lluvia perdida y mojada lo buscaba.
Pero al llegar a su apartamento con otra besándose estaba,
y ahí entendí que un nuevo inicio para mí empezaba.

Aveces por miedo muchas cosas no hacemos,
pero lo que no sabemos es que más tiempo aveces no tendremos.
Todo siempre posponemos,
pero el mañana no conocemos.
Así que por qué seguir desperdiciando el tiempo,
si nuestra vida siempre está en contratiempo.
Creo que de nuestra amistad nunca debimos pasar,
pero ahora con mis margaritas es dónde debo estar.

MetamorfosisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora