Cristhian, un joven que tenía una vida bastante dura, hijo de padres que no contaban con un trabajo, ni mucho menos estudios, con una difícil posición economica, este joven era claramente la contraparte de la vida que llevaba Adam. Con una silla y una pequeña radio se encontraba a lado del sepulcro de su gran amigo de la vida. - ¡GOOOOL!!, estamos ganando iremos a las finales.! – Dijo Cristhian, con una voz entre cortada y lágrimas que se deslizaban por su mejilla que cesaban en una fría tumba, pero con un sentimiento que se mantenía lleno de ilusión y vida, esta pasión con la cual recordaba a un gran amigo que aún se desconocía la razón de su muerte.
-De regreso a la triste vida-. Frase que siempre repetía Cristhian cuando se despedía de Thom, una vida donde todos lo pisoteaban y subestimaban. Abría la puerta y lo primero con lo que se encontraba era con su padre borracho que golpeaba a su madre y a su hermano menor, nunca pudo armarse de valor para detener a su violento padre, que tras la mirada de un temeroso adolescente con numerosos problemas de autoestima, su machismo se acrecentaba y golpeaba también a un indefenso Cristhian. La única forma de escapar de esa triste realidad era sentarse solo en la esquina de su cama y contemplar con anhelo una vieja foto de su gran amor, amor que no pudo ver más debido a las costumbres arcaicas de su recto padre que no le permitió seguir en la escuela para que así no injuriaran el apellido de la familia con la etiqueta de hijo gay. Así concluía otro día, para Cristhian en el que iba a visitar a Thomas para compartir esa enorme pasión que a ambos los unía, el fútbol y así también huir de su estricto padre y su vida de mierda.
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VIERNES
FantasyDos grupos de amigos de Dylan se tienen un enorme odio, "los históricos" intentara llegar a fondo para saber quien es el responsable del asesinato de su amigo Thomas. Por otro lado los conocidos como "la 111" no saben que tienen un peligroso asesin...