Oni. | InoAoi ✓

__________Oni__________

Srta_Infernal
11/09/2020

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Aquella luna superior era demasiado fuerte. Muzan al verse rodeado por tres cazadores y lastimado huyó dejando a los cazadores heridos contra una luna demoníaca, sus débiles cuerpos son maltratados y en fuerzas contra Douma. Zenitsu apenas podía pararse, con la pierna relacionada y mucha sangre, Tanjiro en una situación similar estaba en pie empapado en aquel líquido carmesí; e Inosuke tumbada en el suelo respirando pesado con rasguños y cortadas en brazos y abdomen.

— ¡TÚ!

Las palabras de Tanjiro fueron interrumpidas por la risa del oni, en un rápido movimiento arroja a unos metros del inconsciente Zenitsu. Una espada corto la mano extendida del demonio que lanzó al pelirrojo, con un semblante serio ve de reojo al joven muchacha sangrando.

La máscara de jabalí no escondía ya su rostro, yacía en el suelo. — ¡¿TÚ?! — una imagen llegó a la mente del demonio, una mujer humana con un bebé en besos — Eres su cría...

Con ambas espadas en mano se pone en una posición defenciva protegiendo a sus amigos detrás de él.

— ¡Tanjiro! — grita al sentir que el pelirrojo levantarse. — ¡toma a Zenitsu y largate de aquí! — rápidamente el amable y bondadoso Kamado se negó. — Esto es entre él y yo... un viejo asunto. — murmuró recordando el rostro de esa mujer, aquella que descubrió su progenitora y él, el asesino. — ¡dile a la enana... que... me agrada!

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Así lo recordaba Tanjiro, lo último que vio de aquel gran amigo, su despedida.

Pero...

Allí estaba frente ellos.

Allí con una extraña sonrisa a pocos metros de ellos, completamente sorprendidos y sin palabras. Y ella, Aoi tembló como una gelatina golpeada, aprita la mandíbula fuerte y sus ojos temblorosos querían salir de sus cuencas.

Un paso adelante.

Las lágrimas salían de sus ojos. — ¡¡INOSUKE!! — grita eufórico el rubio.

Otro paso adelante...

— Cuando me lo e enfrentado no tenía esa forma... — agrega haciendo resaltar las características de su rostro que la hacen un demonio.

El pelirrojo quien estaba más adelante impide el avance de la temblorosa peli-negra, él con lágrimas descendiendo. — ¡Él no es más Inosuke! — casi todos estaban derrumbados, ella tuvo que caer primero, pero, no puede soltar ni una sola lágrima.

El oni observaba en su lugar a ambos hombres llorar, a la oni amenazante y a aquella mujer desorientada, ¡¿Qué demonios les pasaba a esos cazadores?! ¿Acaso estaban locos u enfermos? Es aburrido si no lo atacaban. Sus ojos brillaron en un intenso esmeralda para volverse rojos Rubí, su cuerpo se estremeció tomando una forma extraña mientras sus huesos se dislocaban, una transformación; se transformó en una vestía aparentemente un jabalí bestial y grande, con cuernos sobresaliendo de su cuerpo y grandes garras, preparado para matar a aquellas personas.