Opuestos♥💗 KookV

Rosa Roja

Eran las seis y media de la mañana y Taehyung ya se había dado una ducha, quería verse lindo frente al chico que le cortejaba, con suavidad iba secando su cabello rosado con una toalla pequeña.

Luego de que su cabello este totalmente seco, procedió a buscar la ropa que iba a ponerse, con el pasar de minutos él ya estaba vestido con un jeans blanco y un suéter gris. Con rapidez se sentó sobre la silla de su habitación y se miró en el espejo, de tamaño medio, que tenia en frente.

Con delicadeza se puso un poco de crema sobre la suave piel de su rostro, no pensaba maquillarse mucho, solo optó por un poco de rubor, un poquito de gloss para sus rojizos y gruesos labios, finalmente se delineo con marrón oscuro sus ojos y sonrió luego de ver el resultado.

Salió de su habitación aún llevando sus pantuflas de León.

_¿Vas a salir en pantuflas?_ preguntó Jin quien ya estaba despierto a causa de los ruidos que hizo el menor.

_No, ya sabes que estoy esperando a Jungkook_ dijo sonriente mientras se tambaleaba de un lado al otro, demostrando cuan emocionado estaba por ver al azabache.

_¿Te arreglaste para él?_ preguntó con el fin de molestar a su primito.

_Jin, no molestes_ murmuró con un poco de enfado que hizo reír al mayor.

_De acuerdo iré a seguir con mi sueño de belleza_ dijo mientras caminaba hacia su habitación y Tae solo rodó los ojos mientras sonreía ante lo diva que era su primo.

Sus manos temblaban un poco, ante lo ansioso que estaba en ese momento. Por lo visto el menor se estaba tardando un poco, la impaciencia le jugaba en contra y lentamente todo su ser estaba ansioso y quizás también un poquito nervioso, chilló en voz baja al escuchar como los nudillos de Jungkook golpearon la madera de la puerta de entrada.

_Hola_ saludó una vez que abrió la puerta y miró fijamente el gesto del menor que se había quedado mirándolo fijamente.

_Hyung... hola_ sus ojos escanearon el cuerpo del mayor y sonrió en cuanto Tae le sonrió tiernamente, la misma que se esfumó rápidamente al ver que los jeans de Jungkook estaban manchados de sangre y un poco roto.

_¿Qué te sucedió?_ preguntó dejando de lado su tono y postura coqueta para agarrar al menor de la mano y llevárselo hasta su habitación.

_En el camino un perro me atacó_ dijo una vez que logró sentarse en la cama de su hyung y este le miró con preocupación.

_¡Dios mio!, estás sangrando mucho_ dijo agachándose un poco para tocar la tela azulada de los jeans de su menor la cual estaba manchada con un poco de sangre.

_Lo sé, solo que pasó tan rápido y de la nada esa cosa me atacó, yo solo logré darle un puñetazo para que me suelte_ contó haciendo una mueca cuando Tae rompió, de un pequeño tirón, su pantalón.

_Okey, tranquilo ya te curo la herida_ murmuró con nerviosismo mirando la pantorrilla lastimada del menor.

No era en si una gran herida, pero si que había perdido una cierta cantidad de sangre que ahora empezaba lentamente secarse, con el fin de hacer una capa protectora y cubrir la herida con la misma sangre que anteriormente había salido de la pantorrilla del menor.

_Tardaste mucho en llegar ¿Verdad?_ preguntó y lo vio asentir con la cabeza.

Con preocupación se levantó y corrió hacia el baño, luego con la misma rapidez volvió hacia el menor solo que esta vez con un pequeño botiquín entre sus manos.